Indika

Análisis: Indika

El género de los walking simulator siempre trata de dar un paso más allá y demostrarnos que lo importante no es el destino, sino el viaje que hacemos a este, siendo Indika uno en el que acompañaremos a una monja de clausura en un curioso e interesante trayecto. ¡Adelante, llega el momento de preparar todos los rezos que conozcáis!

Durante este análisis procuraremos no entrar en demasiados detalles de su historia, ya que consideramos que de esta forma arruinaríamos la experiencia (y más al tratarse de un título de una duración estimada de 4 horas). 

Este nuevo título desarrollado por Odd Metter y con la colaboración de 11 bit studios ya lo habíamos podido probar durante el Steam Next Fest que tuvo lugar el pasado mes de febrero. Os dejamos con su tráiler a continuación:

La relación entre el bien y el mal

Indika es una joven monja de clausura en un alternativo territorio ruso de finales del s. XIX, que no parece muy de acuerdo con las tareas y obligaciones que conlleva ser una religiosa tan entregada. A menudo se cuestiona imposiciones como la castidad y tiene toda una voz dentro de ella que la incita a romper todas las normas. 

Cuando escucha hablar sobre Dios, ella siempre piensa que no es la entidad con la que se comunica, sino que más bien lo asocia al mal, al mismísimo diablo. Pero… ¿Acaso puede existir el bien sin el mal? ¿Cómo podemos entender que algo es correcto sin conocer error? Todas estas cuestiones le aflorarán la cabeza.

Estas dudas que tiene Indika, no parecen gustarle mucho a sus hermanas, por lo que siempre tratarán de mantenerla apartada del grupo religioso. Llegado el momento, le encomiendan una misión que (afortunadamente) le hará salir de esa «gran prisión» en la que se encuentra encerrada.

¿Será que Indika está equivocada? ¿Estará todo el mundo cabeza abajo?

Los rezos y el diablo como mecánica

Al poco tiempo de comenzar nuestro viaje notaremos que no todo va bien. Nuestra protagonista escucha unas voces en su cabeza (como si de un trastorno se tratara) que la incita a hacer el mal. Para contener esa voz interior ella podrá agarrar con fuerza su rosario y comenzar a rezar. Esto no hará más que mantener al propio diablo un ratito, pues en el momento en el que dejemos de rezar volverá a aparecer. En efecto, esto es toda una mecánica que permitirá cambiar nuestro entorno entre «el mundo infernal» y el nuestro propio.

A lo largo de nuestro viaje encontraremos también cosas muy extrañas y sin sentido, como animales gigantes, construcciones de dudosa estabilidad, alimañas y todo tipo de criaturas que nos confirman lo evidente: algo malo ocurre en la cabeza de Indika.

Cuando probamos la versión demo de Indika, se nos mostraba una mecánica de motocicleta que sí, hemos podido comprobar de nuevo en la versión final, aunque sentimos que todo lo mostrado es una única sección y quizás el producto final no sea tan «movido». Los puzles son muy sencillos (tanto para bien como para mal) y al final no sentimos haber conectado del todo, ni sentirnos inmersos en la trama.

Una mecánica muy entretenida que creemos que se podría haber aprovechado más

Indika recuerda qué es «ser un humano»

Como era de esperar en un walking simulator, se nos plantean muchos aspectos filosóficos a lo largo del viaje. Encontraremos gente moribunda, gente que se podría decir «dejados de la mano de Dios» y nunca mejor dicho. Esto se convierte en un gran dualismo en la mente de nuestra protagonista porque… ¿Por qué ayuda a unos y deja desamparados a otros?

Todo en su cabeza parece chocar. La pregunta que como jugador te realizas es… ¿Le habrá pasado algo? ¿Conoceré qué le ha ocurrido en el pasado? Os puedo asegurar que sí, hallaréis respuestas a todas estas preguntas y quizás os dejen un tanto impresionados.

Creo que, por lo que sea, no debía ser para jugar a las cocinitas esta muñeca

Una extraña ruptura en el gameplay

Indika presenta varias características bastante extrañas. Nada más comenzar veremos unos niveles que podremos subir (no vale para nada, nos lo dicen directamente). Además, veremos ciertas pantallas y niveles en los que se nos representa el pasado. ¿Cómo se hace esto? Transformándonos el juego en un título en 2D y lleno de píxeles.

Esto rompe por completo el juego en dos, haciendo que incluso en momentos de la historia (cuando estamos viviendo el presente) oigamos esos sonidos «retro» que nos transportan sin lugar a dudas a una época pasada. 

Está claro que todo esto se produce de una forma intencionada. Parece que el juego siempre nos trata de remarcar las dos caras de la moneda, el presente contra el pasado, el bien contra el mal, la devoción con la idolatría… ¡Y un largo etcétera que se nos irá planteando!

Los minijuegos pixelados para recordar el pasado de nuestra protagonista son muy entretenidos (y crueles)

Apartado artístico

No cabe duda alguna que toda la ambientación de Indika juega bastante a su favor. Al caminar podemos ver el rastro en la nieve, los personajes que conocemos rebosan personalidad (y quizás también algo de locura) y poco a poco vemos cómo comenzamos «a flipar» viendo cosas extrañas a nuestro alrededor. Todo esto parece tener una alta calidad, sin embargo hemos visto nuestra experiencia un tanto frustrada por algún que otro lagazo o congelación de fotogramas.

La música es algo que hay que valorar con una gran importancia en este título, pues la música en la vida monacal formaba parte del día a día con los distintos cantos que se efectuaban desde que se levantaban hasta que se acostaban. Es cierto que podemos apreciar algo de ellos, aunque quizás era de esperar algo más. Precisamente creemos que el silencio juega un papel importante en Indika, mostrándonos esa parte solitaria de nuestra joven monja. ¿Será que trata de usar el silencio como forma de expiar sus pecados?

Un apartado artístico impresionante, eclipsado a veces por errores

Conclusiones

Indika es un título que a nuestro parecer se queda un poco a medias, en pleno viaje. Es cierto que el final hace que entendamos todo y nos hace establecer nuestra propia reflexión, aunque sí que echamos de menos mecánicas como las mostradas en la demo, que aportaban de dinamismo a ese «caminar constante».

Es una lástima que con la cantidad de personajes que nos encontramos en nuestro trayecto, tampoco podemos interactuar con la mayoría de ellos (apenas 2 o 3), lo cual sentimos que es una oportunidad un tanto desaprovechada para haber indagado más sobre el pasado de nuestra protagonista o del mundo alternativo que se nos plantea.

De igual forma, nos parece un título disfrutable, para poder terminarse incluso en una única sesión y entreteneros con todos los pensamientos y locuras de Indika.

Hemos realizado este análisis en PC con una clave proporcionada por Terminals.io

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *