Se ha ido un 2021 bueno para Nintendo, en el que no solo ha anunciado un sinfín de juegos de su escuela, sino que ha traído a la vida viejos clásicos, ha habido cabida para grandes sorpresas Third Party y ha creado un montón de expectativa por los bombazos que tiene preparado para el año que se avecina, ya en el horno y próximos a salir.
Con el 35° aniversario de Zelda siendo uno de los puntos fuertes (y, también, de los aspectos más criticados), el regreso de Metroid de una manera formidable, Monster Hunter llevando a tope la potencia de la Switch, Mario asomándose por aquí y por allá en los distintos meses del calendario, una revisión del actual hardware y muchísimos anuncios más, repasamos a continuación todo lo que Nintendo trajo este año para el deleite de los usuarios.
Contenido
- 1 Un inicio de año con toda la magia nintendera
- 2 Un pequeño relajo de abril a junio mientras esperábamos el E3
- 3 Un tercer trimestre en los cielos de Hyrule y con las Third Partys apostando en Nintendo
- 4 Un cierre de año brutal
- 5 Se viene un 2022 que apunta a ser el mejor año en la vida de Nintendo Switch
Un inicio de año con toda la magia nintendera
El 2021 arrancó potente, con un febrero que no dio tregua y tiró toda la carne al asador con tres grandes lanzamientos: el primero, Super Mario 3D World + Bowser’s Fury, el port más ambicioso de Wii U, el cual trajo a Switch uno de los mejores juegos de la saga con el agregado de un DLC que fascinó a todos, tanto por el apartado gráfico como por el hecho de respetar las mecánicas de 3D World en un mundo semi-abierto; el segundo, Ghost ‘n Goblins Resurrection, un remake de un viejo clásico de todos los tiempos que llegó de la mano de Capcom como exclusiva temporal a Nintendo Switch; y el tercero Bravely Default, un imperdible en el catálogo de los fanáticos de los RPG.
Pero claro que lo más ambicioso de Nintendo en febrero estuvo en sus presentaciones. En primer lugar cayó un Nintendo Direct con 50 minutos de información. Allí vimos que Miitopia, Mario Golf: Super Rush y The Legend of Zelda: Skyward Sword HD eran proyectos que tenía Nintendo para este año, además de la llegada de Pyra y Mythra a Smash Bros.; pero también conocimos algunos de sus planes para el 2022, como Project Triangle Strategy y el bombazo que significó Splatoon 3.
Pocos días después llegó el 25° aniversario de Pokémon y, junto a él, un Pokémon Presents con el anuncio más esperado, el cual era sumamente previsible y caía por decantación: los remakes de Sinnoh (demominados Pokémon Diamante Brillante y Perla Reluciente, los cuales fueron anunciados para noviembre). Pero luego, en la misma presentación vimos la aparición de un juego poco convencional que viene a revolucionar la saga tal como lo conocemos, Pokémon: Leyendas Arceus, con fecha de lanzamiento prevista para enero del 2022, una entrega que viene innovar en las mecánicas clásicas, intentando readaptar la saga a los tiempos que corren, en donde todos intentan imitar la estética de los mundos abiertos, ofreciendo nuevas formas de jugabilidad que, quizás, hacen parecer las de Pokémon obsoletas (aunque, valga una opinión personal, a mi entender esta franquicia siempre sabe reinventarse y ofrecer nuevas formas de entretenimiento).
Marzo dio cierre al primer trimestre con Monster Hunter Rise, un juego que a poco de salir le voló la cabeza a más de uno, y no fue difícil entender por qué Nintendo apostó tanto en obtener la exclusividad de una nueva entrega del cazador. Un inmenso mundo, una gran variedad de mecánicas, monstruos imponentes y la consola explotando al máximo sus posibilidades fueron los componentes ideales para que las tiendas no den abasto con tanta gente haciendo fila para comprar.
El Q1 también tuvo anuncios como Harvest Moon, ideal para los amantes del farmeo; Apex Legends, que experimentó un downgrade que puso en tela de juicio la potencia del hardware actual; la siempre presente mano de las compañías de terceros, en este caso con Little Nightmares II y Crash Bandicoot 4: It’s About Time; y los infaltables indies, entre los que podrían destacarse Blue Fire y Loop Hero
Un pequeño relajo de abril a junio mientras esperábamos el E3
A veces hay que descansar un poco, y eso suele ser bueno para nuestras billeteras. El segundo trimestre del año tuvo un inicio bastante tranquilo, aunque eso no quiere decir que hayan faltado lanzamientos. De hecho, abril dio el puntapié con New Pokémon Snap, una entrega que muchas veces se mencionó que la Nintendo Switch era la plataforma ideal para ser testigo de su resurrección, y he aquí entre nosotros de la mano de Bandai Namco.
Los indies también tuvieron su representante en este Q2, siendo quizás ENDER LILIES: Quietus of the Knights el más atractivo y, por ende, el que más miradas se llevó; y también podría destacarse There is No Game: Wrong Dimension, aunque pasó entre nosotros sin hacer mucho ruido.
Mayo también tuvo lo suyo, de la mano de Famicom Detective Club, Knockout City y Miitopia, este último llegando como el port de Nintendo 3DS cuyo aterrizaje en Nintendo Switch nunca falla y es casi una verdad absoluta todos los años.
Y junio, que inició con Ninja Gaiden: Collection, cerró apuestas más que seguras: Mario Golf: Super Rush, el juego deportivo del fontanero que siempre está presente y tiene una solidez inconmensurable en el mercado; Tony Hawk’s Pro Skater 1+2, que se ampara en el factor de la nostalgia para despertar interés en los usuarios; y Legend of Mana, el famoso remaster en HD que trimestre a trimestre tiene la gran N para nosotros.
Quizás, uno de los aspectos más osados de Nintendo en este Q2 fue lanzar Game Builder Garage (Estudio de Videojuegos), literalmente un juego para hacer juegos, es decir un videojuego que te brinda las herramientas para aprender el arte de desarrollar y poder compartir eso con otros usuarios, mientras testeamos los experimentos que afloraron en la mente de otros jugadores.
¿Creyeron que eso era todo? ¡Si en el medio estuvo el E3! Para el evento más grande en la industria de los videojuegos, Nintendo tenía preparado un Direct lleno de enormes sorpresas: Metroid Dread es el famoso Metroid 5 y el cierre del hilo argumental de la saga; Kazuya se unió al elenco de combatientes de Super Smash Bros., grandes títulos Third Party, como Life is Strange y Dragon Ball Z: Kakarot se suman al catálogo de Switch, WarioWare: Get it Together estaba a la vuelta de la esquina y Zelda iba a celebrar su 35° aniversario con una edición especial de la clásica consola de bolsillo Game & Watch… ¡y un fenomenal tráiler de la secuela de Breath of the Wild, el cual tiene pautada su salida en 2022!
Un tercer trimestre en los cielos de Hyrule y con las Third Partys apostando en Nintendo
Julio fue uno de los platos fuertes de Nintendo, primero con la salida de Monster Hunter Stories 2: Wings of Ruin, otro juego que vino a poner al descubierto la falta de potencia del actual hardware; y luego, el remaster de The Legend of Zelda: Skyward Sword, el Zelda que da inicio a la leyenda más legendaria de todas, que nos empezó a preparar para vivir los cielos de Hyrule, tal como vimos que ocurrirá en el tráiler de la secuela de Breath of the Wild. Ese mes también llegaron Cris Tales, NEO: The World Ends With You y The Great Ace Attorney Chronicles, otra muestra del apoyo de las Third Partys hacia Nintendo.
Para los amantes de los MOBA, Pokémon se lanzó a conquistar un mercado que hasta entonces le era ajeno, y con la salida de Pokémon UNITE ha generado la típica adicción en esta clase de juegos: una partida más y listo. Claro que el listo es una patraña, ya que han dado vida a un juego muy competitivo y divertido (y frustrante, como todo MOBA) que llegó para acaparar horas y horas en nuestras Nintendo Switch.
Por su parte agosto fue largo, muy largo, y hubo que esperar hasta su ocaso para vivir la acción en No More Heroes III, un exclusivo de Nintendo Switch que la comunidad esperó ansiosamente. Claro que para aminorar la espera, Nintendo nos regaló un Indie World con un montón de juegazos que hicieron olvidar la ausencia de Hollow Knight Silksong. Por ejemplo, allí vimos Bomb Rush Cyberpunk, FAR: Changing Tides, Garden Story, Axiom Verge 2, Shovel Knight: Pocket Dungeon, Metal Slug: Tactics, entre otros títulos. Y también Eastward, que merece una oración aparte porque ha fascinado a más de uno por su estética y jugabilidad. Todo esto dio como desenlace otro gran año para las desarrolladoras independientes a la hora de consolidar sus productos en consolas gracias a Nintendo Switch.
También hubo grandes indies, como fue el caso de Road 96, Death’s Door y el ya mencionado Eastward (salió en septiembre, un mes luego de su anuncio), los cuales convirtieron a este periodo, quizás, en el mejor del año en cuanto a títutlos independientes en nuestra consola híbrida.
Pero si agosto fue extenso, entonces septiembre fue corto. De su propia escuela, Nintendo apostó a WarioWare: Get It Together!, un juego que apunta a la diversión ocasional y con elementos bizarros que dispara risas por doquier. Pero, otra vez, fue un gran momento para las Third Partys, y allí vimos el lanzamiento de muchos juegos que fueron sumamente esperados en la híbrida de Nintendo: Sonic Colours: Ultimate, Life is Strange: True Colors, Ni No Kuni II: El Renacer de un Reino, Diablo II: Resurrected, Dragon Ball Z: Kakarot, Astria Ascending y Hot Wheels Unleashed.
Un cierre de año brutal
Qué decir del último trimestre. Es que ha dado tantos juegos como polémicas, pero así y todo ha redondeado un fin de año excelente para la compañía nipona, gracias al enorme catálogo de juegazos que nos ha brindado, también gracias al lanzamiento de un nuevo hardware, y por último debido a una nueva suscripción al online que trajo tanto enojo como ingresos monetarios. Pero vamos por partes…
Octubre inició con un Smash Direct en el que Sora, el protagonista de Kingdom Hearts y a la vez el luchador más solicitado por los acérrimos fanáticos del mayor crossover de videojuegos, fue anunciado como nuevo y último combatiente del Fighter Pass, despertando todo tipo de pasiones, enamorando a multitudes y entendiéndose como el cierre de una era, ya que es un misterio si Masahiro Sakurai seguirá detrás de los proyectos que significan la continuidad de Super Smash Bros y sus palabras en la presentación sonaron a despedida. Fue tal la agría de la comunidad tras este anuncio, que en las redes sociales se volvió furor y tendencia el hashtag «#ThankYouSakurai».
A los pocos días salió Metroid Dread, el juego que puso a la saga de Samus Aran en el lugar que se lo merecía. Luego de probar esta entrega, es fácil entender por qué Nintendo puso tanto ímpetu en la campaña de marketing para acercar este juego a los usuarios. Fue el primer Metroid en ser candidato a ganar el GOTY (Game of the Year), y aunque no lo logró, uno celebra que por fin esta saga obtiene el reconocimiento y el caudal de ventas que, a veces, le era esquivo.
Para acompañar la salida de este Metroid 5 Nintendo apostó por una revisión del actual Hardware, y aunque mucho se especuló con la posibilidad de ver una consola con mayor potencia y 4K, lo cierto es que igual fue una grata sorpresa la salida de la Nintendo Switch: OLED, la cual apunta a mejorar la jugabilidad en el modo portatil, sobre todo en el aspecto gráfico y visual, ya que dispone de un mayor tamaño, un soporte más práctico y, lo más importante, una pantalla OLED de última tecnología.
Claro que un mes con tanto ajetreo no iba a cerrar sin polémicas. Y es que en el medio hubo un Animal Crossing: Direct, el cual trajo la esperadísima gran actualización de fin de año que tanto ansiaban los fanáticos de este juego, una entrega que en Pandemia había significado el refugio mental para muchos, pero que su vida útil parecía haber llegado a su fin. Para evitar que Animal Crossing: New Horizons muera, la gran N lanzó Happy Home Paradise, el DLC de pago de este juego, el cual iba a ser gratis para quienes se adhirieran al Paquete de Expansión revelado en el Nintendo Direct de junio. ¿Cuál fue el problema? El precio. Nintendo allí reveló el precio de la nueva suscripción online, la cual brindaría la posibilidad de jugar viejos clásicos de Nintendo 64 y Sega Mega Drive, cuyo valor era de 49,99 dólares en Norteamérica y 34,99 euros en España. Como era de esperar, la furia de los consumidores no se hizo esperar.
Aunque no cuenta como polémica, si fue un baldazo de agua fría para muchos el retraso que sufrió Advance Wars 1+2 Re-Boot Camp, un regreso muy esperado por los fanáticos de esta saga que supo brillar en Game Boy Advance y que, en este caso, significó el clásico renacimiento que suele tener preparado para nosotros la gran N.
¡Casi me olvido del fontanero! Con noviembre prácticamente a la vista, también salió al mercado Mario Party Superstars, un recopilatorio de los mejores tableros y minijuegos ofrecidos en las entregas de Nintendo 64.
Por su parte, Noviembre también tuvo lo suyo. Y allí Nintendo apostó todas sus cartas al infalible juego de Pokémon de todos los años. En este caso, Pokémon: Perla Reluciente y Pokémon: Diamante Brillante, los remakes de los juegos de cuarta generación. Y, por mucho que algunos fans apuntaron con bronca hacia la compañía Nipona, y también hacia Gamefreaks e ILCA, lo cierto es que al día de su salida las tiendas explotaron de gente que quería a toda costa revivir su viaje por la región de Sinnoh, demostrando una vez más que el dominio de Pokémon es indiscutible, saque el producto que saque.
En dicho mes también vimos Shin Megami Tensei V, y aunque apuntó estratégicamente a un determinado tipo de jugador, se llevó muchísimos elogios y supo despertar interés en usuarios ajenos a la saga.
Y, como ya es costumbre, las Third Partys se sumaron a la fiesta en ese Q4, en este caso con los destacados de Super Monkey Ball Banana Mania, Tetris Effect: Connected, Dying Light, Project Zero: Maiden of Black Water, World War Z, Star Wars: Knights of the Old Republic y Asterix & Obelix: Slap Them All, lo cual vino bien para suplir la ausencia de un juego fuerte en diciembre para las navidades, ya que para esas fechas Nintendo solo programó, de su propia escuela, la salida de Big Brain Academy: Batalla de ingenio, aunque claro, a sabiendas de que en este trimestre literalmente sacó un nuevo hardware, un candidato al GOTY, un juego de Pokémon y un montón de juegazos, compañía nipona bien sabía que no necesitaba hacer ninguna apuesta para cerrar el año.
Se viene un 2022 que apunta a ser el mejor año en la vida de Nintendo Switch
Lo del 2022 va a ser una maldita locura. Y no lo digo por los rumores que suenan y resuenan, porque no he venido a comentar predicciones ni hacer futurología. Vengo a hablar de lo concreto, de lo que sabemos, lo que es ya una realidad y motivo de hype y ansias: los juegos ya anunciados para el año próximo.
El año va a iniciar con Pokémon: Leyendas Arceus en enero. Ya hablé de él, y me cuesta hacerlo de manera objetiva por ser un fanático acérrimo de la saga, pero me atrevo a repetir una y otra vez que ha venido para revolucionar Pokémon tal como lo conocemos, dándole una bocanada de aire fresco e innovando por completo todas sus características y mecánicas. Tan solo hay que aguardar hasta el 28 de enero para saber si estará a la altura de la necesidad imperiosa de jugarlo que ha sabido crear.
En febrero ya promete su salida Triangle Strategy, el RPG que imita la estética y jugabilidad de Octopath Traveler (funcionando como su sucesor espiritual), y que tiene fecha para el 4 de febrero; y en marzo tendremos Chocobo GP (10 de marzo, para ser exactos), un prometedor título de carreras ambientado en el universo de Final Fantasy.
Abril ha hecho un cupo para Advance Wars 1+2 Re-Boot Camp, el renacimiento de un viejo conocido que fue retrasado hasta el 2022, pero que ya sabemos que saldrá a la luz el 8 de ese mes.
Pero también hay un gran catálogo de juegos ya anunciados, los cuales aun no tienen fecha de salida, pero están programados para hacerlo en algún momento del 2022. Y cuando digo juegos, quiero decir JUE-GA-ZOS, así con mayúsculas y todo.
Para Kirby and the Forgotten Land seguramente no haya que esperar mucho, ya que está pautada su salida para la primavera del año próximo (si me leen los amigos del Hemisferio Sur, en su caso sería para el otoño que se avecina), así que podemos imaginar su salida entre marzo y junio. Y, hablando de la próxima primavera, otro que ha confirmado su aparición en esa estación es Monster Hunter Rise: Sunbreak, el DLC del juego del cazador.
Splatoon 3, Mario + Rabbids Sparks of Hope, Bayonetta 3, la secuela de The Legend of Zelda: Breath of the Wild, Hollow Knight Silksong y Detective Pikachu 2 (estos dos últimos títulos, en realidad, aún no están, programado para dicho año calendario, pero lo más seguro sería verlos en algún momento del 2022, salvo algún eventual retraso). No mencioné a Metroid Prime 4 porque las actuales señales indican que habría que esperar hasta 2023.
Así que sí el resumen del 2021 les pareció bueno, cuando haga el del 2022 no me van a alcanzar los caracteres para expresar lo formidable que seguramente va a ser. Y si lo que quieren es un balance de su año personal jugando a la Switch, la propia Nintendo lo puede hacer por ustedes ingresando al siguiente link.