Análisis: Ary and the Secret of Seasons

Cuatro esferas, cuatro estaciones. Hace mucho tiempo, el mundo de Valdi fue amenazado por un mago malvado. Después de una gran lucha, fue derrotado por el Guerrero legendario y sellado dentro de una Bóveda, encarcelado por toda la eternidad. Para asegurar el encarcelamiento del mago, cuatro grandes sabios juraron vigilar y proteger la Bóveda y es por ello que formaron los Guardianes de las Estaciones, una organización secreta ahora llena de historia y leyenda. Después de que una fuerza misteriosa y gran amenaza arruinase las estaciones, decidiremos ayudar y mantener la paz y el orden en nuestro hogar.

De esta manera es como los desarrolladores independientes belgas Exlin y Fishing Cactus nos presentan Ary and the Secret of Seasons, un videojuego que sin duda muestra una jugabilidad bastante original, pero que podría haber llegado a ser mejor si este desarrollo se hubiese alargado un poco más.

Ary and the Secret of Seasons es un videojuego de acción y aventura en 3D con un estilo cinematográfico, unos personajes encantadores y una historia provocativa, eso sí, con un toque de puzles, rol y plataforma. Encarnamos a la pequeña Aryelle o más conocida como Ary, hija del Guardián de Invierno, mientras que su hermano Flynn, ahora desaparecido y dado por muerto, servía como aprendiz. Por desgracia, las reglas de esta cultura son estrictas y arbitrarias impidiendo a la joven buscar el destino por su cuenta, para ello con un toque a lo Mulán, nos haremos pasar por nuestro hermano para responder en el lugar de nuestro padre y poder hacer que todo vuelva a la normalidad lo más pronto posible.

La jugabilidad principal y tan original que nos muestra el videojuego gira en torno a utilizar el poder de las estaciones, un poder que nos permite crear esferas para manipularlas, siempre teniendo en cuenta el lugar en el que estemos, para así vencer a los enemigos, resolver rompecabezas y atravesar secciones peligrosas y complicadas dentro de ruinas con un parecido muy similar a las mazmorras. Está claro que en un principio puede que nos cueste hacernos tanto con los controles como con la función de cada una de las estaciones, pero enseguida se entiende y lo llevaremos a la práctica en muchas ocasiones. Por ejemplo, si estamos rodeados de agua, utilizando la esfera de la primavera podremos secar todo y llegar al fondo sin ningún problema, o si por ejemplo queremos derretir el hielo, usando la esfera de verano será más que suficiente. Además, a lo largo de esta curiosa aventura nos irán añadiendo más mecánicas como son el doble salto, la escalada o la función de tirar esferas con nuestro propio tirachinas. Si, a lo Bart Simpsons.

Las mazmorras están compuestas por unos rompecabezas muy bien implementados y aunque por algún motivo tengamos dudas de como continuar, su temática según el templo de la estación en la que estemos se hará bastante interesante. En este punto no habrá tantos enemigos y nos centraremos más en evitar caernos por pinchos o utilizar nuestras esferas de manera correcta, aun así puede convertirse en un reto si no prestamos toda la atención a nuestro alrededor. Además, en esta aventura tendremos la posibilidad de descubrir secretos ocultos, como son habitaciones o pasillos, para darnos acceso a cofres de los cuales solo nos proporcionarán monedas.

Estas monedas son útiles, sobre todo para el NPC conocido como Sensei Demi, un mapache que nos dejará por un módico precio creciente, mejorar nuestra vida, daño, agilidad, entre otras más. Otro NPC con el que también podremos interactuar, será el vendedor de pelucas, vendedor de armas y el vendedor de diferentes skins para cambiar de aspecto a Ary.

Anteriormente hablábamos de enemigos, y es que el mundo de Valdi y sus diferentes regiones han sido invadidas por unas hienas bastantes atrevidas y agresivas, pero muy poco amigables ya que siempre nos atacarán. No intentes buscar un reto o una progresión en el combate porque la lucha es lo más fácil del videojuego. La cámara de bloqueo se fijará con frecuencia al objetivo exacto, aunque si pretendemos desplazarnos con un objetivo fijado no tendremos mucha suerte. Además, hay poca retroalimentación de cuando se golpea o se recibe un golpe, y no hay ninguna recompensa tangible por ganar las batallas, de hecho, no sé hasta qué punto esas mejoras que compramos se hacen visibles a lo largo del videojuego. En la mayoría de casos es mejor pasar completamente de los enemigos y continuar sin más, nos seguirán solamente hasta cierto punto. No obstante, tendremos batallas contra jefes donde si requeriremos estrategia y experimentación para exponer vulnerables los puntos débiles. Además, nos podremos ayudar de una habilidad conocida como “El Poder del Solsticio”, esta se carga completando combos y contraatacando al enemigo, aunque si nos ataca se pierde la carga, eso sí, cuanto más alto sea nuestro nivel de solsticio, más potente será el efecto.

Ary and the Secret of Season muestra un mundo abierto en 3D con un estilo visual bastante atractivo, pero por desgracia su pequeño coste de desarrollo ha provocado que con frecuencia aparezcan fallos y una inestabilidad gráfica bastante notable. Por ejemplo, la velocidad de fotogramas inconsistente, el desgarro de las pantallas o las ventanas emergentes suelen ser constantes, provocando que esa experiencia sea menos fluida. Lo más extraño es lo que le ocurre al cabello de Ary en diversas cinemáticas, se lo corta al comienzo del juego, vuelve a crecer en los vídeos, de nuevo vuelve misteriosamente a salir corto, lo mismo ocurre con ciertos objetos que le añades en la cabeza, arruinando de esta manera la inmersión en el personaje. Junto a los gráficos también podemos hablar de los diálogos, algunos muy escuetos, sin sentido y que no dan ninguna información relevante, pero también hay errores como es el diálogo de un NPC o alguna misión, que de manera inexplicable no se han llegado a traducir al español.

En cuanto a la banda sonora se combina muy bien con ese estilo visual que tiene, creando una agradable atmósfera, aunque también se encuentran errores como que Ary avance y la música no se reproduzca o que en ocasiones se haga repetitiva o insignificativa. Hay momentos en que la música se convierte protagonista como son en los combates, cuando aumenta el volumen al tener un encuentro con un enemigo o disminuye al ser eliminados todos. Particularmente hay un sonido de un grito cuando Ary muere, el cual me pareció un poco agónico e incómodo, sobre todo cuando llevas escuchándolo muy de seguido.

En conclusión, Ary and the Secret of Seasons muestra una aventura épica con una historia provocativa que sin duda te enganchará, pero no esperes mucho más porque en determinados apartados su desarrollo se ha quedado a medio camino. Sus diversos problemas provocan un daño inmenso a su experiencia, sin embargo, sigue siendo fácil recomendar el juego a los fanáticos de las aventuras fantásticas con un personaje luchador y valiente. No es un juego perfecto, pero Ary and the Secret of Seasons tiene esencia de ser un videojuego que enganche y con su mecánica tan original de poder manipular las estaciones, sin duda causa mucho interés, aunque lo causaría mucho más si no tuviese un precio tan elevado, 40€ es excesivo. Aun así, si eres fanático de este género, podrás disfrutar mucho con la aventura e historia de Aryelle, algo que sin duda estoy segura.

ROCÍO TORREJÓN

Periodista, escritora y curiosa. Detrás de cada afición y de cada hobby, siempre han estado presente los videojuegos en su vida. Comenzó conociendo los orígenes con una Atari 2600 y descubriendo la edad de oro del software español en un auténtico 8 bits con un Amstrad Cpc 464.