Con Wo Long Fallen Dynasty, el Team Ninja nos vuelve a traer un ‘Soulslike’, que, si bien desde fuera podría parecer una especie de «Nioh ambientado en China», sencillamente estamos ante algo distinto, pero que al mismo tiempo guarda ciertas similitudes con su franquicia hermana.

La Guerra de los Tres Reinos con un toque de fantasía oscura

Wo Long Fallen Dynasty

La historia de Wo Long Fallen Dynasty nos lleva hasta el año 184, finales de la dinastía Han en China, donde un extraño elixir está haciendo surgir toda clase de bestias demoníacas. Nuestro papel como héroe o heroína sin nombre (y sin voz) que crearemos al principio con un potentísimo editor, será el de restaurar todo este caos y ayudar a toda clase de personajes en dicha tarea.

Seamos sinceros, la historia no es más que una excusa para avanzar. Es más, a no ser que seas muy conocedor de toda esta época de la historia antigua de China, ni siquiera te vas a enterar de la mitad de las cosas, ni de quien es casi nadie. Al igual que sucedía en Nioh. Por lo tanto, lo podemos resumir todo en que combina historia real, con fantasía oscura y evidentemente con muchísimos elementos ficticios.

Jugabilidad

Es aquí donde realmente Wo Long Fallen Dynasty brilla con gran esplendor. El Team Ninja nos vuelve a traer un título endiabladamente divertido que sí, se inspira en Sekiro, pero para nada pretende ser una copia de éste. El juego prescinde de las posturas de Nioh, para centrarse en un sistema de parrys muy gratificante que será clave dominar para derrotar a los enemigos (especialmente a los jefes).

Tenemos una barra de postura (aquí llamada espíritu) que avanzará de izquiera (cuando nos golpeen) a derecha (cuando golpeemos nosotros o hagamos parrys). El objetivo será tratar de mantenerla siempre hacia la derecha para así poder ejecutar ataques especiales que destrozarán la barra de espíritu del rival, hasta lograr dejarle incapacitado. Momento en el que podremos ejecutarle o bien asestarle un golpe devastador en el caso de los enemigos intermedios más poderosos o los jefes finales.

Dominar este sistema será imprescindible, aunque por otra parte cabe decir que es bastante más permisivo con los timings para hacer estos parrys, que por ejemplo Sekiro. Pero ojo, igualmente vamos a tener que tener muchos reflejos y conocer bien los ataques del enemigo para saber cuando pulsar el botón. Pero en resumidas cuentas, es un sistema muy divertido y gratificante, como ya decía antes. Dando lugar a un combate rápido, frenético y bastante espectacular.

También un montón de hechizos que podemos aprender, distribuidos en las cinco fases, es decir, la fase del fuego, la del agua, la tierra, la madera y el metal. Hay desde lanzar bolas de fuego, pasando por imbuir nuestra arma en fuego o toda clase de buffos de combate. Dichos hechizos no consumirán ningún tipo de maná, sino que nos subirán la barra de espíritu hacia la izquierda, el lado negativo, por lo que hay que usarlos con cabeza y no abusar de ellos si no queremos quedarnos vendidos ante el rival.

Otra mecánica bastante original del juego es el sistema de moral. Al principio de cada escenario empezaremos con nivel uno de moral y para ir subiéndola deberemos derrotar enemigos y sobre todo ir conquistando el terreno a base de poner nuestro estandarte en cierto lugares específicos. Esto irá aumentando nuestra moral, lo que nos dará garantías a seguir avanzando por la zona, ya que los enemigos también cuenta con su propia moral y enfrentarnos a ellos cuando nos sacan varios niveles es poco menos que un suicidio… Ya no hablemos del jefe, que tendrá la moral máxima y será imperativo subir la nuestra lo máximo posible para poder hacerle frente.

Eso sí, Wo Long Fallen Dinasty es en líneas generales un juego bastante más fácil que otros de su género, incluidos los Nioh. En esta ocasión Team Ninja ha apostado por una dificultad notablemente más baja y a poco que seáis asiduos a este género y dominéis sus mecánicas de combate, habrá muchísimos jefes finales que nos os van a durar más de uno o dos intentos.

Por supuesto igualmente vamos a morir bastante y de hecho cuenta con 3 jefes concretos que nos lo van a poner muy complicado (mención especial para el primer jefe del tutorial, que personalmente me mató unas 15 veces, ya entenderéis por qué). Pero como ya digo, en general Wo Long Fallen Dynasty es bastante más sencillo que otros de su género. Al menos en la primera partida, puesto que luego se desbloqueará el end game, con mejores objetos a conseguir y un aumento en la dificultad que ahí sí que vamos a sufrir de lo lindo (ojalá esa hubiera sido su dificultad base desde el principio).

Reiteración de todo por bandera

Si de algo peca el Team Ninja (a parte de no saber muy bien contar historias interesantes y que se entiendan bien), es de que suelen reciclar muchos elementos en cada uno de sus juegos. Por ejemplo los enemigos. Wo Long Fallen Dynasty tiene poquísima variedad de enemigos base (jefes sí que tiene muchísimos y bastante variados), lo que da como resultado que a partir de la mitad del juego, nos veamos enfrentándonos una y otra vez a los mismos tipos de enemigos, lo que al final llega a ser bastante cansino. Se salva evidentemente por su divertidísimo sistema de combate, pero desde luego podrían haberse esmerado más en este apartado.

Los escenarios por su parte han mejorado respecto a Nioh. Son bastante variados y tienen un mejor diseño, desde luego, pero siguen muy lejos de otros juegos de este género. Además, continúan estando distribuidos en fases independientes, por lo que no hay un gran mundo interconectado.

El equipo por su parte aunque variado, continúa la estela de Nioh, con decenas de items del mismo tipo que acabaremos rompiendo para materiales o vendiendo, como si de un Diablo se tratara. Aunque las armas son muy divertidas, con diferentes tipos de ataques especiales y éstas van desde alabardas, pasando por toda clase de espadas, katanas, espadas dobles, mazas, etc.

Gráficos y Sonido

En este apartado nos encontramos con bastantes altibajos. Ya que por un lado Wo Long Fallen Dynasty tienen un gran diseño de personajes principales, que lucen muy bien durante las escenas de vídeo, pero luego sus escenarios, texturas y demás dejan bastante que desear… Pareciendo un juego de principios de la pasada generación o finales de la anterior a esa.

Team Ninja debe cambiar ya su motor gráfico (usa el mismo que Nioh) y actualizarse bastante en este sentido. Mientras que por su parte, el sonido de los golpes y demás está muy bien, así como la música que ralla a buen nivel, aunque se torna repetitiva a medio plazo, puesto que durante todo el juego van sonando los mismos temas en cada nivel.

El doblaje a inglés, japonés o chino (éste último para mayor inmersión) está genial, por lo que nada que objetar en este apartado.

Conclusión

Wo Long Fallen Dynasty es un título notable. Team Ninja desde luego sabe hacer unos sistemas de combate super divertidos, que por sí solos ya pueden hacernos olvidar otras carencias de sus juegos, como la poca variedad de enemigos o un apartado técnico bastante desfasado. Como digo al principio, Wo Long no es Nioh 3, ni tampoco un Sekiro de segunda, tampoco pretende nada de eso. Sencillamente es una nueva obra con la que el Team Ninja ha querido hacer algo un poco diferente y desde luego lo cosigue.

Salvo el end game y unos pocos jefes finales muy contados, es un juego bastante fácil en general, especialmente si somos duchos en este género llamado ‘Soulslike’. Lo que no quita que igualmente vayamos a morir bastante y lo más importante, nos lo vamos a pasar de vicio durante sus 35 – 40 horas de duración que tiene en su primera partida.

Análisis: Wo Long Fallen Dynasty
Jugabilidad endiabladamente divertidaTiene una duración y contenidos generososMejora el diseño y variedad de escenarios respecto a Nioh...
...Pero siguen lejos de los mundos interconectados de otros títulos del géneroLos enemigos básicos se repiten hasta el infinito tras la primera mitad del juegoTécnicamente bastante desfasado. El Team Ninja debe renovar su motor gráfico
8.2Nota Final
Jugabilidad9
Apartado gráfico7.5
Apartado sonoro8