Space Moth Lunar Edition pertenece a esa tendencia que tiende —valga la redundancia— a recuperar los inicios de algo que tiene muchas papeletas para convertirse en otro algo muy grande. Si este verano pudimos disfrutar de Star Hunter DX, ahora nos llega una remasterización de Space Moth para recordarnos aquellos tiempos en el que los videojuegos no eran las obras colosales que son hoy en día, sino ideas de acción frenética que devoraba las monedas de 25 pesetas —o su equivalencia en yenes, dólares, etc.—. Y que gracias a ellas, tenemos lo que tenemos hoy en día.

Y si encima lo hace con una edición llena de novedades y mejoras en todos los aspectos, el público viejuno no puede hacer otra cosa más que aplaudir y el «jovuno» mirar —y disfrutar— de los inicios de nuestra afición preferida.

 Chorus worldwide y 1CC Games nos traen un matamarcianos a la vieja usanza. En Space Moth nuestra única misión es eliminar a todas las polillas espaciales que nos salgan hasta llegar a una polilla que deja atrás el diminutivo para convertirse en un enemigo que intimida y embelesa al mismo tiempo, tras el sonido de alarma que nos avisa que el jefe final va a hacer acto de presencia. Y, por supuesto, esquivar todo proyectil que aparezca en la pantalla para llegar de una pieza.

Un aspecto gráfico cuidado y unos escenarios relajantes que al poco tiempo desquician

Nuestra nave también tiene forma de mariposa en Space Moth. Y a bordo de ella recorreremos escenarios de una belleza barroca que relaja. Creo que los desarrolladores del juego han hecho esto a propósito para preparar al jugador para la tarea que le espera. Porque tras empezar y disfrutar de esos escenarios tranquilos, enseguida empezará un festival de disparos que dejará muy pocos puntos vacíos en pantalla y nuestra calma inicial pasará irremediablemente a la tensión y concentración para movernos por el escenario cuidando de que el único punto débil de nuestra nave no sea alcanzado por la multitud de proyectiles.

Los escenarios están llenos de color y de detalles como las setas, que también llegan a convertirse en enemigos. A lo largo de nuestro viaje encontraremos polillas de todos los tamaños, desde polillas minúsculas que desaparecerán al primer contacto con nuestro proyectil hasta enemigos que ocupan más de la mitad de la pantalla y que cuentan con una barra de energía que tendremos que disminuir a base de tesón y concentración.

El aspecto visual del juego es una delicia, es una mezcla de calma y tensión, con un colorido estupendo y de gama variada que te mete de lleno en zonas que te dan la sensación de estar surcando un mundo exterior al nuestro. Aquí vas a sentir que estás fuera de la Tierra, que estás en un lugar desconocido, agradable y terrible a un tiempo. Vas a ver frentes que te van a dar la sensación de que no cabe nada más, vas a ver movimiento y vas a ver belleza antigua.

Melodías de otro planeta y apartado sonoro correcto

La banda sonora de Space Moth ha sido remasterizada para la ocasión y suena muy bien. Las melodías que te acompañarán durante el viaje transmiten esa soledad que se debe sentir a los mandos de una nave y muy lejos de tu hogar y los tuyos. Cada fase tiene su propia melodía y todas son capaces de transmitir lo que está sucediendo en la pantalla. Los sonidos de las explosiones de los enemigos de mayor tamaño también se hacen notar, pero tampoco te esperes unos efectos increíbles que te hagan taponarte las orejas. Los efectos de sonido cumplen, las melodías sí están a otro nivel.

En los juegos de antes los efectos de sonido no sobresalían más allá de la música y en ese aspecto Space Moth respeta la esencia de los clásicos. Y esta es una de sus muchas virtudes.

Jugabilidad, exigencia y diversión como las de antes

Y aquí llegamos al punto clave de Space Moth. Como buena remasterización de un juego antiguo, conserva todas las virtudes de los arcades clásicos, lo que hará las delicias de los más viejos del lugar. Surcar los cielos llenos de polillas no solo es un reto difícil de llevar a cabo sino que es una experiencia que deja un muy sabor de boca cuando se acaba. Si bien es cierto que la nave peca de ser lenta, que podrían haberle añadido un poco más de velocidad y agilidad al manejo porque los proyectiles enemigos no andan escasos de esas dos virtudes.

Este el punto más débil del juego: la velocidad de desplazamiento. La nave responde perfectamente a las órdenes del mando pero la lentitud con la que se mueve complica más aún esquivar el fuego enemigo. Solo si eres muy hábil conseguirás pasar por este carnaval de disparos sin que te abatan. Es una pena, porque con lo bien que responde al mando y la fluidez de sus movimientos, un extra de velocidad hubiera significado un aumento notable en el disfrute del título. Esto no significa que el título no sea divertido, al contrario, pero sí es cierto que podía haber resultado más completo con un añadido de velocidad.

Se agradece la inclusión de una ayuda en forma de tres bombas que pueden ser algunas más si recogemos los ítems, en las que pulsando el botón adecuado —el botón B del Xbox Controller en mi caso— podremos limpiar la pantalla de proyectiles y enemigos que no sean final bosses. En algunos momentos, los proyectiles abarcan tanto que se agradece, y de qué manera, contar con una ayuda así.

El juego cuenta con varios modos. Tenemos el clásico modo historia, en el que se nos dará la opción de elegir entre dos rutas y en el que tendremos que evitar todo lo evitable y eliminar todo lo eliminable para llegar al final. Aquí surcaremos lugares tan bonitos como peligrosos, lleno de criaturas que solo tienen en mente acabar con nosotros, sapos que llenan la pantalla de disparos desde el suelo, libélulas con exceso de munición, mariposas que en vez de batir sus alas, baten proyectiles… Y esta será la tónica de viaje.

Luego tenemos el modo Desafío, en el que nos enfrentaremos a distintas pruebas de habilidad que pondrán a prueba nuestro manejo de la nave y nuestros reflejos. Y también cuenta con un modo Práctica nos permitirá jugar para acostumbrarnos a los controles y a los patrones de movimiento de los enemigos para ir a la batalla sabiendo más o menos— lo que nos espera.

Para culminar tenemos un modo de clasificación donde podemos ver qué jugadores son los más habilidosos a los mandos de la nave y encontrar una motivación para superarnos a nosotros mismos y completar juego adquiriendo los 31 logros que la versión de Steam trae consigo.

Concluyendo

Space Moth Lunar Edition es el clásico matamarcianos de «toda la vida», pero más completo. A los mandos de la nave he sentido esa nostalgia que se sentía en los salones arcade de antaño. Transmite lo que títulos como 1942 transmitían, pero de una forma más poderosa. Entra suavemente en tus sentidos y se va haciendo un hueco en tus ratos de ocio para ser una opción importante en los ratos lúdicos del día.

Quiero resaltar que es una pena que nuestra nave no se mueva un pelín más deprisa. Creo que la experiencia sería mucho más satisfactoria con un movimiento más veloz. Los enemigos se mueven rápido, o más bien, sus proyectiles, y aunque el equilibro de velocidad no es desajustado, creo que un pelín más de velocidad le hubiera venido al juego muy bien tanto en la parte propia como contraria. y no lo hubiera hecho tan frustrante en ocasiones.

Por lo demás, me ha encantado su aspecto visual, lleno de color y buenas ideas en el diseño, implantando de una forma magnífica animales terrestres y convirtiéndolo en pesadillas del espacio. Y qué decir de su aspecto sonoro, unas melodías que te transmiten soledad pero que son tan hermosas que te quedas escuchándolas en esa soledad a la que te lleva la tarea de estar a años luz de casa a bordo de una nave espacial. Los efectos de sonido cumplen a la perfección indicándonos cuando ha caído el enemigo. En este tipo de juegos no se precisa otra cosa.

Si quieres revivir la magia de los antiguos «juegos de marcianitos» en un decorado que transmite espacio por todos sus ángulos, Space Moth Lunar Edition es una opción muy acertada. Un juego de los de antes, de los que no duran mucho pero que te llevará un tiempo dominarlo. Un juego para esos ratos breves entre el descanso y el horario de la obligación que te los llenará de sensaciones inolvidables.

Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por Player Two.

Análisis: Space Moth Lunar Edition
Su apartado visualMelodías tranquilasAcción trepidante
La nave es muy lentaFalta el modo dos jugadores
7.9Nota Final
GRÁFICOS8.4
SONIDO7.9
JUGABILIDAD 7.5