Dustborn es una aventura narrativa desarrollada por Red Thread Games, creadores de Dreamfall Chapters y Draugen, y editada por Quantic Dream, lo que siempre es una garantía de calidad.
El título nos invita a liderar una banda tan diversa como inclusiva en un viaje por carretera a través de los Estados Divididos de América. A lo largo de la aventura habrá tiempo para la esperanza, la diversión, la amistad, la tristeza, la mentira, los robots… y sobre todo para el rock y el poder de las palabras. Un pilar fundamental en la jugabilidad de Dustborn tal y como veremos más adelante.
Antes de adentrarnos de lleno en el análisis, a continuación podéis disfrutar del tráiler de lanzamiento del título.
Contenido
Un emocionante viaje por los Estados Divididos de América
Estamos en 2030, los Estados Unidos de América son cosa del pasado y han dado paso a los Estados Divididos de América. De este modo, Dustborn nos sitúa en una ucronía o realidad alternativa que parte tras el atentado fallido a John Fitzgerald Kennedy.
El país norteamericano se encuentra totalmente dividido y aislado del resto de naciones desde la «Transmisión», evento de origen desconocido del que surgieron las «Anomalías». Así se conoce a las personas que tras este suceso desarrollaron «el poder de la palabra» que se manifiesta a través de poderes sobrenaturales de diferente índole.
La historia se narra desde el punto de vista de nuestra protagonista, Pax, una anomalía ex convicta, estafadora y marginada que ha sido contratada para transportar un misterioso paquete desde Pacífica a la Nación Libre de Nueva Escocia, a través de la República Americana controlada por la justicia autoritaria.
Sin embargo, este no es un viaje que podamos hacer en solitario, necesitamos ayuda. Necesitamos una banda diversa e inclusiva compuesta por anomalías con personalidades diferentes y poderes peculiares.
Juntos viviremos multitud de aventuras con el objetivo de sobrevivir a este viaje por carretera, para ello el grupo se hará pasar por una banda de rock que está de gira por los diferentes estados de la nación dividida.
Una gran aventura narrativa en forma de cómic
La aventura comienza con una escena que nos presenta a Pax, Sai, Noam y Theo como los personajes principales. Han robado un misterioso paquete que deben transportar desde Pacífica a Nueva Escocia.
En referencia a los personajes principales, Pax como ya hemos mencionado es la protagonista principal de la historia y tiene la habilidad de emplear las palabras para influir en los sentimientos de los demás, Sai tiene una fuerza fuera de lo normal, Noam es capaz de manipular las emociones a través de las palabras y Theo, el líder de la misión, no es una anomalía pero es un experto en tecnología.
De este modo tan directo el juego nos mete en situación, a diferencia de otros títulos, Dustborn no comienza con una larga introducción en la que se explique toda la situación. Lo más parecido a esto es la opción que tenemos en el menú principal de ver un prólogo en forma de cómic, pero lamentablemente este es el único apartado del título que no se encuentra traducido a nuestro idioma.
Y es que todo el juego se nos presenta como si de un cómic se tratase. Con detalles tan geniales como el resumen en forma de número de cómic al finalizar cada capítulo. Además, podremos ver el ya clásico porcentaje en este tipo de juegos para comparar nuestras decisiones con la del resto de jugadores.
He de reconocer que he empatizado mucho con los personajes a lo largo de la aventura, mucho más de lo que pensé antes de comenzar a jugar. Y es que Dustborn presenta un elenco de personajes tan variado, tan inclusivo y con tanta personalidad que me cautivaron desde el primer minuto y os aseguro que estaba deseando seguir conociendo más, tanto de la historia de los personajes a nivel personal como de aquello que nos depararía el viaje por carretera.
Un necesario mensaje a favor de la diversidad, la normalización e inclusión
Dustborn trata temas profundos que resulta necesario abordar también a través del arte de los videojuegos.
A lo largo de la aventura se representa una gran cantidad de colectivos y se hace énfasis en valores positivos en favor de la diversidad, la normalización y la inclusión.
Asimismo, se abordan cuestiones como la importancia de la palabra como arma para alcanzar la libertad, el peligro que supone la desinformación a través de la limitación de los medios de información, la identificación de género, los físicos no normativos, la salud mental, la importancia de sentirse perteneciente a un grupo, etc. Todos estos temas, en mi opinión, tratados de un modo muy natural y acertado.
Apartado artístico
De entrada os digo que el apartado artístico de Dustborn me ha parecido excelente, sin duda el aspecto en el que más destaca el título.
En referencia al apartado visual, tal y como podéis apreciar tanto en el tráiler de lanzamiento como en las imágenes adjuntadas en el análisis, Red Thread Games ha apostado por una acertada estética de cómic que le otorga una gran personalidad a Dustborn. Además, un aspecto a valorar positivamente es que durante las conversaciones se nos permite controlar la cámara libremente logrando un aspecto más cinematográfico si cabe.
Todo el título está representado como si de un cómic se tratase, incluida la fuente de los textos (no os preocupéis si no os gusta este tipo de fuente, tenéis la opción de elegir una más clásica). Asimismo, si vais a jugar leyendo los subtítulos, os recomiendo que activéis la opción de que las frases de cada personaje aparezcan con un color diferenciado al del resto, de este modo os será mucho más fácil seguir las innumerables conversaciones en el juego.
Esto unido al acierto en la paleta de colores escogida, el magnífico diseño de las protagonistas y la variedad de escenarios existentes, logran que Dustborn sea lo más parecido a disfrutar de un cómic en movimiento.
Con respecto al apartado sonoro, la música tendrá una gran importancia en nuestro viaje, por lo que la banda sonora también está a la altura. Aunque el doblaje en inglés es de calidad, se echa en falta el doblaje al castellano.
Un aspecto curioso es que Theo, uno de los personajes principales, suelta de vez en cuando algún vocablo en español e incluso en un momento determinado mantiene una conversación en nuestro idioma. En este momento se acentúa más si cabe el sentimiento de lo genial que hubiera sido tener toda la aventura doblada a nuestro idioma. No obstante, cabe destacar el gran nivel de la traducción de los textos, sobre todo teniendo en cuenta la gran cantidad de líneas de diálogo del juego.
Una gran aventura narrativa…
Dustborn es una gran aventura narrativa que poco a poco nos va introduciendo diferentes aspectos de la historia. En este juego las conversaciones que mantenemos con el resto de personajes van a ser el núcleo principal y prácticamente absoluto del juego.
La narrativa está muy bien llevada y en ningún momento se me hizo pesad0 ningún diálogo, tal vez este aspecto se vio reforzado por el modo en el que enseguida empaticé con los personajes como he comentado anteriormente.
Durante las conversaciones podremos elegir entre diferentes opciones de diálogo. Habrá momentos en los que se nos dará la oportunidad de ir escogiendo todas estas opciones una detrás de otra y otros (habitualmente cuando aparezca un cómic en la parte superior derecha de la pantalla), en los que únicamente podremos seleccionar una de ellas. Nuestras decisiones en estos momentos tendrán incidencia en el transcurrir de la historia, sobre todo en la parte final del título.
Tal y como he comentado anteriormente, Dustborn basa prácticamente toda su jugabilidad en su narrativa lineal, de modo que el tamaño de los escenarios es reducido y en todo momento se nos indica dónde debemos ir con un rótulo gigante. No obstante, Red Thread Games ha tratado de dotar de variedad a su obra a través de diferentes mecánicas jugables, algunas implementadas con más acierto que otras.
… y otras mecánicas jugables
Por un lado, en algunos momentos tendremos que combatir como si de un beat’m up 3D se tratase. Sinceramente, el movimiento de Pax, la escasa sensación de impacto en los enemigos y la nula dificultad de los combates hacen de esta mecánica un simple trámite para avanzar en Dustborn. De hecho, en nuestro primer combate el juego nos da la opción de escoger entre un modo de juego con menos combates y enemigos o el modo normal, personalmente escogí este segundo modo y no noté que hubiesen excesivos combates y la dificultad como ya he comentado me resultó muy asequible.
Otras de las mecánicas jugables es la de capturar Ecos que permitirán a Pax aumentar el número de palabras que puede emplear. Esta mecánica que se realiza a través de un sencillo minijuego la acabaremos repitiendo una y otra vez con la única finalidad de aumentar el repertorio de palabras a nuestro alcance, aunque no aporta demasiado a la jugabilidad.
Y por último, otra de las mecánicas empleadas es calcada a la de los clásicos títulos rítmicos en las que debemos pulsar una serie de botones en el momento exacto. Esta se presenta con la excusa de componer, ensayar e interpretar distintas canciones, recordad que nuestro grupo utiliza la tapadera de ser una banda de rock para poder moverse por los Estados Unidos Divididos de América y es sin duda la mecánica jugable, más allá de la narrativa, mejor integrada y llevada en la obra de Red Thread Games. Además la calidad de la banda sonora hace que estos momentos se conviertan en un regalo para nuestros oídos.
En definitiva, Dustborn destaca en lo que mejor sabe hacer, narrar una historia. El resto de mecánicas jugables introducidas tratan de aportar algo de variedad al título con un mayor o menor acierto.
Y si os estáis preguntando la duración del título, a mí me ha costado pasarme el juego 18 horas, eso sí, yo soy de ese tipo de jugadores que siempre escudriñan cada rincón del mapa. Imagino que este número de horas podrá disminuir un poco si nos dedicamos a ir directamente al turrón de la historia, si interrumpimos las conversaciones con el resto de personajes o nos saltamos aquellas que no son necesarias para progresar en la aventura.
Conclusión
Dustborn destaca en lo que mejor sabe hacer, narrarnos un gran viaje en carretera a través de los Estados Divididos de América. Esto unido a su excelente apartado artístico hacen que el título sea totalmente recomendable para todo el que quiera disfrutar de una aventura narrativa de calidad en la que se abordan y normalizan multitud de temas de gran importancia en la sociedad actual.
En lo que no destaca tanto el título es en algunas de las mecánicas jugables que se han introducido con la intención de aportar algo de variedad a la jugabilidad. No obstante, en ningún momento se llegan a hacer excesivamente tediosas ya que el núcleo central de Dustborn se basa en su narrativa, genialmente llevada.
Dustborn se encuentra ya disponible para PlayStation 5, PlayStation 4, Xbox Series X/S, Xbox One y PC. Además, de la mano de Meridiem Games podemos adquirir el título en formato físico para PlayStatión 5 y Xbox Series X/One.
Este análisis se ha realizado en PlayStation 5 con una clave proporcionada por Meridiem Games.
Dustborn: una gran aventura narrativa
✅ Lo Bueno:
• Su apartado artístico, tanto visual como sonoro. • El diseño y la personalidad de los personajes • La narrativa está muy bien llevada.❌ Lo Malo:
• No está doblado a nuestro idioma. • Algunas de las mecánicas jugables no aportan gran cosa.Sistema operativo: PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series X/S y PC.
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