Kitsune Zero, precuela del juego de plataformas Kitsune Tails, llega a Steam el 12 de septiembre.
Kitsune Zero, la precuela de Kitsune Tails, el juego de plataformas inspirado en los clásicos más queridos e impregnado de la mitología japonesa y con diversas relaciones, llega a Steam el lunes 12 de septiembre. Experimenta una nueva historia y 24 nuevos niveles en esta reimaginación/expansión de Super Bernie World, el juego de plataformas de activismo electoral descargado por más de 350.000 votantes en las urnas.
Creado por el desarrollador Kitsune Games (MidBoss, Ultra Hat Dimension, Super Bernie World) en colaboración con el editor MidBoss™ (2064: Read Only Memories), vuelve a visitar los cuatro mundos originales de Super Bernie World, ahora ambientados en el universo de Kitsune Tails. Experimenta nuevas secuencias de la historia y la actuación de voz de un reparto que incluye a Michele Knotz, la voz de Misty, May y Jessie del doblaje inglés del anime de Pokemon. Sean Chiplock, cuyos créditos incluyen The Legend of Zelda: Breath of the Wild, Genshin Impact, Spider-Man en Marvel’s Avengers, y docenas de títulos de anime y videojuegos más queridos, sirve como narrador de Kitsune Zero.
Afronta ocho nuevos mundos exclusivos del DLC, con nuevos retos y enemigos como los soldados Edo, dispuestos a perseguir a la zorra protagonista Yumi en cuanto la vean. Conquista el nuevo modo difícil, con enemigos que se desplazan a gran velocidad. Disfruta de nuevas características de calidad de vida, como la amortiguación de los saltos y la posibilidad de continuar desde cualquier fase.
Corre, salta y pisotea a las criaturas fantasmales inspiradas en el folclore japonés que se interponen en el camino de Yumi. Recoge potenciadores a lo largo de cada campo y castillo para aumentar de tamaño, lanzar bolas de fuego y volverte temporalmente invencible en este homenaje a los primeros juegos de plataformas de ocho bits que definieron el género durante décadas (desde luego, su parecido con Super Mario Bros 3 es hasta sospechoso). Descubre mundos secretos de bonificación, vence a los enemigos más rápidos en el modo difícil y salta al ritmo de la nueva y contagiosa música.
Derrota a una siniestra banda de samuráis para detener la guerra de conquista del clan. Escucha los gritos del onmyouji local, un burócrata hechicero asignado a mantener la paz, y acaba con el pacto mágico que los samuráis tienen con los espíritus vengativos. Solo Yumi puede romper la alianza y restablecer la paz… y tal vez pueda tener una cita por las molestias. Reúne los ingredientes necesarios para detener la magia del pacto oscuro y al líder del clan samurái de una vez por todas. Pero ten cuidado, porque puede que haya que rescatar a una damisela, erre que erre, apuesto caballero en apuros.
Kitsune Zero prepara el terreno para la próxima entrega de Kitsune Tails, que se lanzará el año que viene. La joven e inexperta híbrida zorro-humana Yuzu (a la que pone voz Kira Buckland, la voz de 2B de NieR: Automata) debe salvar a su pareja de un destino funesto y enfrentarse a un celoso miembro de la nobleza kitsune. Desbloquea poderes en forma de bonitos trajes a lo largo de seis encantadores mundos creados a partir de un profundo amor por los juegos de plataformas retro.
«Kitsune Zero nos permite ofrecer a los fans una primera muestra del mundo de Kitsune Tails y ampliar el juego de plataformas que la gente adoraba en Super Bernie World«, dijo Eniko Fox, cofundadora de Kitsune Games. «Los speedrunners, sabed que nos hemos asegurado de que Kitsune Zero siga siendo compatible con los speedruns de Super Bernie World, ¡así que es hora de bajar esos tiempos y empezar a presentarse a las maratones!»
Kitsune Zero estará disponible por 4,99 USD como contenido descargable de pago para Super Bernie World en Steam y de forma independiente en itch.io. Kitsune Tails se lanzará en 2023 en Nintendo Switch, PlayStation 5 y 4, Xbox Series X|S y Xbox One, y Windows PC y Linux a través de Steam e itch.io.
En 1979 vino al mundo una especie de alíen que en 1985 descubrió un salón recreativo de los barrios viejos. Luego fue un Amstrad y sus cargas infinitas y ahí seguimos con los sistemas de hoy… Y de antes.