Pokémon Unite es sinónimo de adicción. Una vez inicias un MOBA tienes dos opciones: hacer caso a tus ganas e implicarte horas en el juego aún sabiendo que adiós a tu vida social, o bien probarlo un tiempo y acabar dejándolo, hasta que de pronto un día vuelves a querer sentir esa adrenalina de sus partidas y quien sabe si vuelvas a engancharte de forma intermitente o bien con ganas de querer mejorar más enserio, ya que es un género muy competitivo. El caso es que este MOBA tiene un poder de enganche muy alto y más si tenemos como protagonistas a los adorables Pokémon.
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Si te gusta Pokémon, este juego te encantará
¿Quién va a poder resistirse aunque sea a echar unas partidas a lo random manejando a un pokémon que le guste y que sienta que se le da medianamente bien o como poco se sienta cómodo jugando con él? Evidentemente Pokémon Unite nos conquista se mire como se mire, o se le acaba odiando por aquello de no encontrar un equipo donde realmente sientas que puedas avanzar en rango, y acabes cansado de invertir horas para nada, además de desquiciado cuando finaliza la partida por esa falta de coordinación en el equipo, o porque por alguna razón no te ha parecido justo y no puedes hacer nada para cambiarlo, ya que la elección del equipo es aleatoria a no ser que juegues con amigos o gente conocida.
Y claro, no siempre van a coincidir en Pokémon Unite tus intereses con los del resto del equipo, quizá tu quieras jugar más en serio y hacerlo bien, mientras encuentres gente que no sabe jugar a ese nivel, aún no se le da tan bien, y sólo está probando o no le apetece implicarse tanto en ese momento, o le has pillado justo en una partida mala (que también sucede incluso al jugador que consideramos pro y es normal, no se puede encestar siempre 300 puntos en todas y cada una de tus partida ni desenvolverse igual de bien, aunque lo ideal es que se tienda a buscar cierta constancia en ganar) ¡a saber!
Pero como decía al principio, es probable que acabes volviendo a jugar unas partidas al cabo de un tiempo. La mejoría puede llegar precisamente con la experiencia y con la implicación activa en el juego, es decir, no te desanimes si de pronto en una partida eres un dios en el mapa aniquilando a todo pokémon que venga a tocarte las bases, y las dos siguientes resulta que apenas llegas a encestar 50 puntos y dando gracias. Hay muchos más factores a tener en cuenta además de tu habilidad en el mapa. Hay momentos divertidos asegurados en estas partidas, eso tenedlo claro, y si empiezas a ver que puedes mejorar tus objetos cuantas más horas juegues y mejorar tu rango, son razones más que suficientes para querer invertir tu tiempo, incluso aunque tengamos unos títulos pendientes entre manos por jugar. Cuántas veces hemos encendido la consola porque queríamos jugar a algo, sin saber muy bien a qué, y ahí está el Pokémon Unite, juego por el cual no hace falta ni ponerse a buscar la tarjeta de juego y donde enseguida te vas a sentir muy activo en el juego.
O mismamente tenemos otros títulos a los que jugamos pero al final nos decantamos por Pokémon Unite, porque total son solo diez minutillos de partida en principio, y ya sabemos la mecánica, o estamos enganchados en menor o mayor medida y queremos probar a ver si esta vez encadenamos varias partidas buenas y mejoramos, o porque queremos conseguir estos tickets de las misiones que terminan. Siempre hay razones para volver a Pokémon Unite incluso aunque hayamos acabado un poco cansados de perder.
Pokémon Unite no te aburrirá ni por mil horas
Pokémon Unite es un videojuego muy casual, divertido y con el que no te vas a aburrir ya que tus movimientos son trascendentes en cada minuto de la partida prácticamente, y debes reaccionar como mejor puedas junto a tu equipo. Te vas a sentir muy activo y se impulsará tu ímpetu de querer lanzar tus mejores ataques a ese oponente que no para de querer eliminar tus bases una y otra vez. Lejos de parecer que siempre es lo mismo y el escenario varia más bien poco ya que son las mismas líneas o calles del mapa, cada partida te brindará situaciones y oportunidades diferentes y, aunque a veces desde los primeros minutos ves que tu rival es un hueso duro de roer y que incluso algunos de tus compañeros te invitan a votar para rendirse en la partida, y piensas ¡cómo es posible que lo tengan tan claro si sólo llevamos 4 minutos de juego! otras veces es todo lo contrario ya que ves que puedes moverte por el mapa como Pedro por su casa ya que nadie te va a poner la zancadilla para que no anotes puntes, y puedes moverte relajado.
Reconozcamos que estas últimas partidas también nos llenan de orgullo y satisfacción porque parece que dominamos el mapa sin despeinarnos y podemos lucirnos encestando más y más puntos, que también nos lo merecemos. Y además después de jugar varias partidas intensas muy reñidas, es de agradecer que podamos ganar casi por la cara en otras tantas, porque también necesitamos descansar en Pokémon Unite. No se puede rendir siempre igual o ser altamente productivos si jugamos horas y horas seguidas, es algo que también puede suceder cuando decidimos tomarnos en serio este tipo de juegos, y no pasa nada. De ahí radica la magia y el enganche en los MOBA, si todo fuera lineal y ganáramos todas las partidas, acabaríamos también un poco cansados, es la probabilidad tanto de ganar como de perder la que nos empuja a querer salir al mapa y dar lo mejor de nosotros mismos y si no sale en esta partida, podemos volver a jugar otra donde podrá ir mejor, y es así como pueden pasar las horas sin darnos cuentas. Hay dos situaciones claras: o bien estás ganando muchas partidas seguidas y piensas en aprovechar esa racha buena en rango, o bien se van alternando las que ganas con las que pierdes y pruebas siempre una más a ver si la balanza de inclina hacia el lado bueno y ganas la siguiente.
Una partida nueva en Pokémon Unite conlleva unas situaciones nuevas a las que tener que responder de la mejor forma posible, y en donde el tiempo, juega a tu favor o en tu contra, ¡y vuela! a poco que estés concentrado en los movimientos que debes de tomar, sobre todo en esos casos donde la partida está muy reñida y no puedes relajarte ni medio segundo. En estos casos prepárate para sentir tensión, nervios, emoción, euforia y de todo porque cualquier cosa puede pasar, aunque muchos opinamos que Zapdos es quien realmente maneja el cotarro y te dará el veredicto, algo que continúa desbalanceado y es motivo de enfado de los jugadores. No es para menos. También es cierto que a veces el final puede sorprenderte mucho tanto para bien como para mal, al margen de cómo haya ido la parte de Zapdos, por lo que realmente la incertidumbre por el resultado final está presente más de lo que a priori te parece.
No podemos ver exactamente todo lo que hacen tus compañeros durante la partida, por lo que aunque tu sientas que no estás jugando como te gustaría, puede que otros de tus compañeros estén tirando del carro y se gane la partida, y otras veces puede suceder a la inversa, por lo que no pierdas esperanza a no ser que sea muy claro el destrozo y tu equipo no tenga bases ya mientras el oponente tenga aún varias.
Los MOBA y su peculiar adicción
Los MOBA tienen un alto poder de adicción precisamente por la incertidumbre que conlleva cada partida, por lo que podemos ganar y mejorar a más horas ya que la experiencia de juego es la que te va a ayudar a ser mejor en el juego, junto con una estrategia adecuada en la partida.
Por nuestra parte, tenemos el control de un pokémon y decidimos como queremos que se mueva teniendo en cuenta sus habilidades y su posición, si es defensa o ataque por ejemplo. Si nos cansamos de jugar a Pokémon Unite con la misma criatura, sabemos que hay un amplio abanico de posibilidades y esto es parte de lo que va manteniendo al jugador más pro activo, ya que hay novedades de nuevos pokémon, más misiones para conseguir ropa bonita, fichas y tickets para mejorar objetos y en definitiva tener personajes más fuertes y seguir avanzando en la experiencia del juego. A veces no hacen falta tantos elementos para querer seguir jugando ya que, este tipo de juegos al ser online, se disfrutan mucho cuando se juega con amigos y simplemente están bien para echarse unas risas.
Periodista, le encanta escribir y ver el mundo desde el lado alegre. Los videojuegos le han acompañado desde que era una niña, allá por la época del píxel, y le siguen emocionando como una enana a día de hoy.