Lo bonito de los videojuegos es, la oportunidad que dan a los desarrolladores de poder plasmar aquellas aventuras e historias que llevan años en su imaginación, dando lugar a decenas de juegos independientes a lo largo de los años. Demostración de esto, se puede ver en cada evento indie, como fue el pasado E3 en el mes de junio, cuando se pudieron ver decenas y decenas de juegos independientes que se lanzarían a lo largo de este año y el año que viene.
Arietta of Spirits fue el ejemplo de uno de ellos, ya que llamaba muchísimo la atención por su mundo pixel art y, está claro, por su inspiración a la saga The Legend of Zelda. Desarrollado por Third Spirit Games y editado por Red Art Games, Arietta se convierte en un juego muy bonito, con algún desafío y una historia mundana e interesante, pero no llega a cuatro horas. Una duración tan corta que no terminas viendo un buen desarrollo en los personajes y sus relaciones, y siempre quieres esperar más del juego, pero nunca llega esa evolución.
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Una historia llena de fantasía espiritual
Para poneros en contexto, Arietta of Spirits tiene una trama mundana y espiritual, plasmando un mundo melancólico que te querrá atrapar, pero todo es tan simple y tan corto, que termina perdiendo parte de su esencia. En otras palabras, la historia trata de una niña llamada Arietta, cuya familia se va de vacaciones a la casa de su difunta abuela. Tras su llegada, una noche es visitada por un espíritu llamado Arco, muy parecido a Dragonite, quien le comenta que la ha estado observando durante mucho tiempo. En ese momento, ella descubre que puede comunicarse con el mundo espiritual y acepta ayudar a librar la casa de vacaciones de su familia de los malos espíritus. La narrativa no está nada mal y la historia me parece interesante y original, de hecho, hacen mucho hincapié en las escenas, pero una pena que todo pase tan veloz.
En cuanto comiences a jugar tendrás un escenario ambientado en un mundo de fantasía, donde tu pequeña protagonista actuará de vínculo entre el mundo de los vivos y el mundo de los fantasmas, teniendo que enfrentarse a peligrosos errantes que querrán complicarle su camino. No obstante, no te imagines muchos escenarios porque realmente todo se resume a un bosque y diferentes cuevas, una pena, porque se ha echado en falta más paisajes del estilo. La cuestión es, que cuando comencé este juego tenía en mente la idea de que sería predecible y, con el paso de las horas, se convertiría en un juego muy interesante. Pero no, esto no ocurre por la sencilla razón de que es tan corto que cuando crees que se va a convertir en algo interesante, ya ha acabado.
Relacionado con lo anterior, nunca entenderé el empeño que tienen algunos desarrolladores en hacer este tipo de juegos con zonas repetitivas y que parecen idénticas sin poner un minimapa. Mira que ya me da igual que sea un mapa grande o que no solo sean carteles, pero un minimapa con sombra de guerra que se vaya desbloqueando y que te permita saber perfectamente hacia donde ir y dónde estás, me parece idóneo. De lo contrario, cuando me pedía una misión explorar una zona, siempre acababa en la plantación de manzanos de mi abuela, no sé cómo lo hacía. Además, esto mismo os lo explicaba al principio, pero es que dentro de esta aventura tendrás relación con tres personas concretas (más tus padres) y no se desarrolla ningún vínculo que vaya más a allá de ser la chica de los recados.
Combates con golpes injustos
Sin embargo, la jugabilidad de Arietta of Spirit está mucho más orientada a los combates, pero estos son bastante estándar y con unos controles muy básicos. El principal problema que vi en los enfrentamientos son los golpes injustos que recibes, ya que el personaje cuando hace la acción de atacar se queda parada y no puede cancelar dicha acción. Es un poco frustrante, ya que continuamente será necesario dar un buen golpe si lo que no quieres es quedarte desprotegido y recibir daño. Por cierto, este daño está representado por unos contenedores de corazón, arriba a la izquierda, y estos se podrán aumentar con esencia de errante que sueltan los enemigos al morir.
Estos combates se resumirán en golpear con una espada de madera, sí de madera, y más tarde una habilidad que es un escudo espiritual que se recargará automáticamente, pero que te ayudará tanto a protegerte como para hacer daño. La variedad de enemigos es escasa, aunque los pocos jefes que hay si crean un pequeño reto con alguna mecánica interesante de la que estar atento. Pero Arietta of Spirits no desarrollará ninguna otra habilidad o mecánica que haga el combate más interesante, sino que siempre será lo mismo. Tampoco te esperes tener un inventario o algún consumible, tampoco habrá tienda o herrero, lo que te decía, se queda en lo básico. No obstante, si tendrás un menú de objetivos que te señale tu próxima misión, el progreso de los núcleos y alguna tarea que tengas para completar.
Un pixel art extremadamente precioso
Como algo positivo y, realmente muy positivo, es su estilo visual. El pixel art con el que está desarrollado se ve estupendamente, tiene una estética y un colorido que recuerda mucho a otro JRPG. Su paleta de colores tan viva y con esa luminosidad me recordó mucho a Stardew Valley, añadido a las atractivas animaciones de los enemigos y del entorno. No obstante, la banda sonora es agradable en algunos momentos, pero no captura la sensación de un combate con un jefe, ya que se mantiene continuamente la misma melodía, salvo en casos excepcionales. Lo que si me ha gustado son los arreglos musicales nostálgicos que llegan como un paquete complementario de lo que siente la pequeña Arietta.
Conclusión
En conclusión, Arietta of Spirits me entró por los ojos en cuanto lo vi publicado y anunciado en el pasado E3, sin embargo, me da pena que haya sido un juego con el que tenía tantas expectativas que no ha logrado cumplir la mayoría. Está claro que el entorno y su estilo visual es maravilloso, el pixel art es un elemento que, si se utiliza bien, puede dar un resultado impresionante, y aquí se puede ver. Pero no todo son los gráficos. Arietta of Spirits es un juego que se queda a medio camino, en el que pides más, pero nunca se desarrolla ni explota su potencial, dejando unos combates simples, controles sencillos y añadiendo una interfaz muy básica, todo ello con una duración de casi cuatro horas. No obstante, si te animo a adentrarte en este mundo de fantasía y conocer la historia que le llevó a Arietta despejar los fantasmas de su hogar y ayudar a su abuela, estoy segura que el pixel art te enamorará.
Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por Third Spirit Games.