The Division ha sido una franquicia bastante exitosa para Ubisoft. The Division 2 tiene actualmente 40 millones de jugadores en total, según los números más recientes del editor francés, por lo que tiene sentido que quieran expandir ese universo más allá de su oferta actual de solo dos juegos.
Ubisoft acaba de anunciar que están creando un nuevo juego de Division. The Division Heartland, como su nombre indica, estará ambientada en el mismo universo, pero «proporcionará una perspectiva completamente nueva» junto con «un nuevo escenario» que casi seguramente resultará ser el Medio Oeste de Estados Unidos. Una torre de agua gigante rodeada junto a los árboles solo grita el pequeño pueblo de Wisconsin o Illinois.
En The Division, una cepa de viruela altamente virulenta llamada Green Poison es liberada como parte de un complot terrorista y causa una pandemia global que acaba con gran parte de la población mundial. La amenaza de un colapso social total hace que el gobierno de los EE. UU. Active “La División”, incluidos varios agentes durmientes domésticos empeñados en garantizar la continuidad del gobierno. Gran parte de The Division 2 se dedica a luchar contra las facciones locales en Washington DC y tratar de recuperar al presidente, lo que no va del todo bien. Desplazarse lejos de la acción proporcionaría una visión interesante de cuán fuerte es el alcance de The Division en áreas escasamente pobladas que están lejos de los grandes juegos de poder de los juegos anteriores.
No tenemos muchos otros detalles aparte de que será un juego gratuito, así que espere monetización en forma de microtransacciones y probablemente un pase de temporada de algún tipo. En el mismo anuncio, Ubisoft también confirmó la existencia de un juego para móviles de Division que se dará a conocer próximamente, y también que llegará más contenido a The Division 2, aunque de nuevo fueron ligeros en los detalles.
Periodista, escritora y curiosa. Detrás de cada afición y de cada hobby, siempre han estado presente los videojuegos en su vida. Comenzó conociendo los orígenes con una Atari 2600 y descubriendo la edad de oro del software español en un auténtico 8 bits con un Amstrad Cpc 464.