Silt nos pone bajo la escafandra de un buzo en el fondo marino que mezcla mecánicas de distintos estilos de juego (puzzles, aventura, terror y supervivencia). Este videojuego está desarrollado por Spiral Circus Limited (@GamesCircus) y distribuido por la empresa británica Sold-Out Software.
El videojuego de temática submarina se lanzó el 1 de junio exclusivamente en formato digital en todas las plataformas: PlayStation 5, PlayStation 4, Xbox Series X-S, Xbox One, Nintendo Switch y en PC a través de Steam.
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SILT: Sumergido en lo más profundo y oscuro, el rayo de luz es nuestra única opción.
Como punto de partida, Silt nos situa en lo más profundo y oscuro del océano, bajo el traje de un buzo que se encuentra explorando laberínticos paisajes submarinos, llenos de peces y unas extrañas criaturas llamadas «Goliats«. Para poder avanzar en nuestra exploración, necesitaremos usar nuestra habilidad de poseer peces a través de un rayo de luz que sale de nuestra escafandra.
Su mecánica, es bastante peculiar, ya cuenta con varias mecánicas cogidas de distintos géneros de las que se pueden destacar sobre todo los puzles y la supervivencia. Como es más que evidente, tendremos que lidiar con diferentes situaciones que se nos presentan a modo de acertijos, dónde nuestro ingenio será la clave, ya que solo dispondremos de nuestro habilidad y los peces que nos rodean para salir airosos (y sin morir) de dichas situaciones.
Si bien la cantidad de peces que nos ofrecen para controlar no es «extremadamente» amplia, son más que suficiente para poder resolver los retos que se nos proponen y en ningún momento da la sensación de que estos se queden cortos a la hora de avanzar en los mapas.
Cuando controlamos a los peces, es cuando tenemos la posibilidad de sacar partido a sus habilidades (Nadar más rápido, hacer uso de la electricidad…) pero ojo, nuestro cuerpo se queda como cascarón o un recipiente corpóreo vacío, y por tanto, vulnerable.
Al llegar al final de la fase tendremos que combatir con enromes criaturas para hacernos con su energía. Estas criaturas, llamadas Goliats, estarán presentes a modo de «jefe final» en los 4 niveles o capítulos que incluye el juego. Estos bosses no dejan de ser un puzzle, ya que tendremos que analizar los patrones de movimiento y sus conductas para poder saber cual es su punto débil y conseguir «derrotarlos» con las habilidades de los peces que nos rodean en pantalla.
Su jugabilidad, aparentemente sencilla, está bastante equilibrada, aunque en ocasiones (y sobre todo si no tenemos cuidado) se puede hacer complicada ya que hay elementos en pantalla que solo por tocarlos, nos matarán. Y es aquí donde podemos ver cierta inspiración en la mecánica del estilo roguelike que puede hacernos repetir en una y otra vez una fase del juego hasta encontrar el modo de avanzar.
Un apartado visual oscuro pero que brilla por sí solo
Su apartado visual es una delicia a los ojos que destaca sobre todo por su apariencia monocromática, con una atmósfera bastante oscura en los escenarios que van desde el abstracto fondo del mar pasando hasta ruinas antiguas sumergidas. Estos escenarios crean contraste con los elementos lumínicos que nos rodean y que nuestro personaje emite a través de su escafandra. Su apartado artístico (similar al de Limbo un juego lanzado en 2010) a través de la superposición de capas 2D, recrea en un entorno tridimensional que aporta profundidad en las distintos mapas en los que nos moveremos.
Otro de los aspectos a valorar de manera positiva es el tratamiento de la luz y el énfasis que se le da dentro de SILT, consiguiendo que nos sumerjamos por completo en el juego y aportándole el matiz enigmático que, por sí mismo, ya tiene el fondo del mar.
Su escasa y breve banda sonora, es bastante consistente con el sentimiento que se nos pretende generar; es enigmática y oscura. El hecho de etiquetarla como «breve» es por la simple razón de que está presente en momentos concretos del juego ya que principalmente lo que predomina es el silencio del fondo del océano y los efectos de sonido propios (sonido de burbujas, la respiración a través de la escafandra o el movimiento de los peces).
Experiencia breve pero muy placentera
Es importante destacar que SILT no deja de ser un juego indie y que por tanto, no va a ofrecernos una durabilidad extensa. Su duración gira en torno a unas 4 horas de juego (En este caso, fueron las que me llevó a mi completar este juego) pero es más que suficiente y satisfactoria para genera curiosidad al jugador, trasportarnos al fondo del mar y empaparnos de su atmósfera.
Todo el conjunto de elementos visuales, jugables y sonoros que rodean a Silt es lo una experiencia más que notable a la hora de disfrutar de esta aventura llena de puzzles submarinos y los retos que nos plantea como jugadores.
Hemos realizado este análisis en Nintendo Switch con un código proporcionado por Jesús Fabre.
