Los juegos sobre gatos son de por sí solos casi un género que siempre llaman la atención. Cada año salen decenas de juegos protagonizados por estas adorables mascotas, y el último que nos llega de este estilo es Copycat, un título desarrollado por Spoonful of Wonder (siendo este su primer videojuego) y distribuido por los mismos junto a Neverland Entertainment y Nuuvem.
Copycat es, por encima de todo, una aventura narrativa en la que todos los demás aspectos pasan a un segundo plano para centrarse en la historia que nos cuentan, una narración que busca emocionar y lanzarnos un mensaje sobre el hogar y el sentido de pertenencia de las mascotas.
El juego salió en Steam en septiembre del 2024, y no ha sido hasta finales de este agosto que ha llegado una edición física para PlayStation 5 anunciada hace unos meses por parte de Tesura Games, la cual viene con una postal coleccionable.
Hemos podido jugar su versión para consolas y en este análisis vamos a desentrañarte cuales son los entresijos de este viaje gatuno sobre encontrar un hogar.
Bajo estas líneas, su trailer:
Contenido
Copycat: Una historia llena de tristeza
Copycat, como comentábamos anteriormente, apuesta por centrarse en contar una historia que logre emocionar, donde empaticemos con los personajes y que sea capaz de robarnos unas lágrimas. Al iniciar de la aventura, nos encontraremos en un refugio de animales, donde una señora bastante mayor llamada Olive querrá adoptar a un felino. En ese momento, podremos elegir entre seis tipos de gatos diferentes, sin aftectar en nada a la narrativa más que en cómo lucirá nuestro protagonista.
A partir de ese momento el gato será adoptado y llevado hacia el hogar de Olive, dejando claro que en un primer momento la relación no empezará siendo recíproca entre la entrañable abuela y el gato, siendo este segundo muy arisco con el trato cercano y familiar de su dueña, irá tomando poco a poco un camino de conexión entre ambos, aprendiendo varias lecciones por el camino.

Esta nueva cotidianidad, dará un gran giro cuando nuestro protagonista se vea envuelto en un elaborado plan de un gato callejero para suplantarle y robarle su hogar. El tono, el objetivo y la vida de nuestro protagonista cambiará, y nosotros tendremos que ayudarle a recuperar ese ahora anhelado hogar.
Después de este inicio, que envuelve alrededor de los 4/5 primeros días, es difícil hablar de la historia sin entrar en spoilers, pues va tomando giros valientes e interesantes que nos atrapan, nos hacen querer descubrir como acabarán y nos dejan al borde de las lágrimas en más de una ocasión. Porque esta es una aventura sobre encontrar un hogar, pero a lo largo del viaje nos hablarán de muchos otros temas que tocarán la fibra sensible a muchos de los jugadores.
Para entender además el pensamiento del gato, irán apareciendo en determinados momentos palabras o frases en el escenario, que servirán como todo aquello que no puede decir.
Su duración es lo justo y necesario para que no empiece a hacerse repetitivo, pues la podremos terminar entre 3 y 4 horas, dividiéndose estas en pequeños capítulos de menos de media hora cada uno.
En definitiva, en lo que a narrativa se refiere, Copycat es un notable juego que cuenta una historia que funciona, que es clara en lo que busca contar en todo momento y que nos emocionará a través de empatizar con dos personajes bien desarrollados.

Una jugabilidad algo tosca
En su apartado jugable, Copycat es un juego bastante tosco. El movimiento del felino y sus acciones se complican por culpa de la dificultad que genera su jugabilidad, haciendo que en secciones con más movimiento nos frustremos, y en otras sencillas, asequibles o que dan cierta libertad al jugador para moverse no nos divirtamos tanto como deberíamos o no nos motive explorar.
El juego se divide en partes en primera persona y partes en tercera persona. Cuando vivamos la aventura en primera persona, será sobre todo en esos momentos narrativos en los que no podremos movernos libremente: Copycat nos dará diferentes elecciones que deberemos tomar, aunque la verdad es que echamos en falta algunas decisiones que realmente cambiaran el curso de los acontecimientos, pues ninguna afecta en nada de lo que nos pueda pasar.
Si que, a lo largo de sus diferentes capítulos (cada uno de estos representando una vida en la relación del gato) encontraremos diferentes tipos de mecánicas que hace que el juego intente innovar cada cierto rato. Por ejemplo, tendremos pequeñas secciones de QTE, no excesivamente difíciles, pero en las que no nos podremos dormir en los laureles si queremos conseguir los objetivos.
También nos encontraremos con varios objetos para interactuar, como puede ser comida que robemos para llevarnos a nuestro cuenco, mariposas a las que atrapar, o niveles más «oníricos» que seguro sorprenderán a la gran mayoría de jugadores.

Gráficamente algo limitado
Otro aspecto en el que Copycat no destaca es en su apartado visual. Los modelajes de los personajes se sienten como un juego de hace un par de generaciones, igual que los espacios, las cinemáticas o las tediosas pantallas de carga entre escenas o pequeñas acciones.
En Copycat se echa en falta constantemente animaciones de distintos momentos. Por ejemplo, habrán momentos que nos permitirán subir a árboles, pero eso simplemente se traducirá en una pantalla de carga para pasar directamente a lo alto del árbol, sin nada de margen para movernos, solo pudiendo observar a nuestro alrededor (y a veces ni eso).
Elementos como este pueden parecer una tontería, pero sin duda resta a la inmersión de «sentirse como un gato» y hace que, cada acción que Copycat nos otorga para hacer con total libertad, no sea tan satisfactoria como cabría esperar.

Por último, en su apartado sonoro, tendremos en casi todo momento pequeñas melodías muy leves y calmadas que nos acompañarán en cada nivel, reforzando ese sentimiento tierno que busca tener en todo momento Copycat. Esto está muy bien logrado, creando una atmósfera apacible cuando toca y revuelta cuando estamos en situaciones mas peligrosas.
Además, en lo que al gato se refiere, tendremos varios tipos de maullido que nuestro felino podrá ir haciendo, un pequeño detalle bastante agradable.
Conclusiones
Copycat es un juego muy recomendable para todos aquellos que aman a los gatos, quienes encontrarán en este título una historia tierna, con giros valientes para no perder la atención del jugador y que, si sabemos perdonar sus más que palpables defectos, como una jugabilidad tosca y un apartado gráfico algo pobre, podremos disfrutar y vivir una aventura corta pero bonita.
Este análisis se ha realizado en PlayStation 5 gracias a una clave proporcionada por Tesura Games.
Análisis: Copycat - ErreKGamer

✅ Lo Bueno: • Su historia, llena de giros • Apartado sonoro trabajado • Busca innovar a medida que avanzamos ❌ Lo Malo: • Jugabilidad muy tosca • Gráficamente pobre
6.5