Team Stargazers, estudio de desarrollo de Aureole, ha empezado su vida en el mundo de los videojuegos con un año en el que no sacará uno, sino dos videojuegos, pues Dungeon Cleaner está previsto también para 2025. Ambos bajo el sello de calidad español de JanduSoft.
Este videojuego se basa en la velocidad para brindar al jugador una experiencia frenética en la que ayudará a dos ángeles, Ramila y Ryleth, a regresar a su hogar e intentar salvarlo de los demonios.

Muchos han comparado este título con Sonic, aludiendo a las malas decisiones que el estudio ha tomado últimamente a la hora de hacer sus videojuegos. Muchos han considerado que este es el Sonic bueno y… sin entrar en comparar dos obras de forma no constructiva, sí que querría mencionar que hay algún que otro problema de diseño que tiene en común con, precisamente, Sonic.
La primera de ellas es la cámara. Demasiado cerca de la aureola que el jugador controla, haciendo imposible que pueda ver en algunos momentos del juego. Teniendo en cuenta la velocidad a la que el jugador va, lo ideal sería que la distancia de visualización sea también grande, para poder anticipar los obstáculos y no caer en generar una dificultad artificial. Sin ir más lejos, Celeste presenta el nivel completo la mayoría de veces, y no por eso se resta dificultad al título.
El arte de Aureole
Aureole presenta un arte 2D estilo cartoon en la que predominan los tonos pastel durante las conversaciones de los protagonistas, que están compuestos por figuras redondeadas. Durante el juego, se ve una estética pixelart bastante cuidada capaz de dejar claro cuáles son los elementos que resaltan en el escenario y con los que podrá interactuar el jugador.

La interfaz de usuario, por otro lado, es sencilla: a un lado, el tiempo que el jugador está dedicando al nivel. Por otro, el camino que lleva recorrido. Esto es así porque el juego está planteado de tal forma que, según el tiempo que haga (cuanto menos, mejor), completará el nivel con aureola de bronce, plata u oro. Si no consigue llegar a la de bronce, tendrá que empezar el nivel de nuevo.
Esta es, sin duda, una decisión arriesgada que puede cansar a algunos jugadores. Sin embargo, la adición de rankings personales, mundiales y de amigos en la entrada de cada nivel es un añadido que genera la necesidad de picarte a ver si consigues un tiempo mejor. Y esto nos lleva a…
Jugando a Aureole
La jugabilidad de Aureole tiene luces y sombras. Luces porque han creado un sistema de movimiento innovador y que supone un reto para los jugadores. Sombras, porque a veces tiene ciertos problemas. Vamos a dejar de correr, aunque sea por un momento, y detengámonos a hablar de ello.
Ya se comentó que la cámara está demasiado cerca en Aureole. Pero en el nivel de la lava, cuando la cama deja de seguir al personaje para seguir a la lava, esto se vuelve muchísimo peor. No es por la velocidad, ni por la dificultad, es porque de verdad es algo a tener en cuenta.

Los controles, por otro lado, están muy bien mapeados. Las palancas han cobrado gran importancia poco a poco a lo largo de la historia de los videojuegos, y Aureole las usa perfectamente.
El diseño de niveles de este videojuego es bastante bueno. Todo está muy bien medido para que el jugador tenga que bajar de golpe algunas veces, para que pueda hacer los dos saltos a la perfección…
Sin embargo, hay un factor que no termina de convencerme, y es que a veces encadenas ciertos elementos del escenario que convierten el juego en una cinemática. Y salen brillitos y… no haces nada.

Aureole tiene un buen diseño de niveles y unas buenas mecánicas… Es un juego que se basa en la velocidad. Quizá esos segundos que perdemos viendo una especie de cinemática podríamos estar corriendo o haciendo cosas espectaculares nosotros, en lugar de mirar y observar.
En general, el gamefeel es bastante bueno. Por un lado, es fácil, porque no hay muchos juegos de aureolas que van de salto en salto. Por otro, precisamente por eso es más complicado aún.
La historia de Aureole
La historia de Aureole es, como casi siempre, una excusa para jugar. En el videojuego pocas veces se puede huir de este handicap, incluso cuando la historia es extremadamente buena. La cosa está, por supuesto, en unirlos, equilibrarlos, y hacer una obra maestra. Por supuesto, no vamos a pedirle esto a un estudio que acaba de empezar y que demasiado bien lo ha hecho en muchos campos.
En esta historia seguiremos a Ramila y Ryleth, dos ángeles que estaban simplemente recibiendo un sermón de su jefe (su Zurdeza) cuando su asentamiento de ángeles es atacado por demonios. Estos personajes presentan unos rasgos de personalidad muy marcados que me hacen pensar incluso si no será que Ramila tiene TDAH. Por supuesto, son mutuos contrapuntos: una más bromista, otro más serio, uno más responsable, la otra despreocupada. Y a pesar de eso, conectan, encajan y se cambian.

En cada nivel de Aureole hay un objeto, y este tiene unas líneas que te cuentan un poco el lore que rodea a dicho objeto. No son cosas trascendentales, pero está bien. Ahora, mucho ánimo para conseguir esos objetos…
Por último, y como conclusión… este juego es político. Yo soy del tipo de persona que piensa que todos lo son. Este juego llama al jefe de los ángeles «Su Zurdeza», haciendo pensar que son la izquierda, que terminan con el servicio militar porque es inútil, pero… oh, llega la guerra. ¿Esto no lo tenía previsto Ped… Su Zurdeza?
Creo que en las sutilezas está la virtud a menos que el desarrollador quiera ser claro y no dejar medias tintas. Creo, por otro lado, que la autocrítica es muy positiva y los debates entre la izquierda moderdada de Ryleth y la casi anárquica de Ramila hacen mucho bien.

Sin embargo, creo que para hablar de esto hay que ser mucho más claro en estos momentos porque es muy fácil tergiversarlo, es muy fácil que no se interprete bien, que se use para hablar mal del juego. No obstante, hay que aplaudir la valentía.
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Este análisis se ha realizado con una clave para PC proporcionada por JanduSoft