Desde los chicos de Póntica, confundada por el madrileño Diego Rodrígez-Ponga, y Megaleven han cerrado una cooperación para presentar un nuevo juego llamado Plus Ultra: Legado. Y, aunque así a lo mejor no te llame la atención, este juego pretende marcar la diferencia en el mundo de los videojuegos con una llamativa novedad visual que se denomina «comisvania». Eso sí, se trata del primer videojuego en formato 2D que ofrece, mediante una llamativa estética, nunca antes vista, la historia de España sobre la conquista de América.
Tres años lleva desarrollándose el que va ser uno de los videojuegos más fascinantes de los últimos tiempos y que se espera su salida para el último cuatrimestre de 2025. La distribución y venta del videojuego llega gracias al acuerdo de cooperación que la empresa Póntica ha llegado con la editora de videojuegos Megalevel. Así, estas novedosas compañías se unen con el fin de dar a conocer este juego de plataforma basado en una cautivadora y emocionante experiencia histórica. Diseñado para PC y Nintendo Switch, está a un paso de convertirse en realidad.
Conoce más sobre Plus Ultra: Legado
Plus Ultra: Legado busca ofrecer una visión más equilibrada y realista de la historia de España, específicamente sobre los eventos relacionados con la conquista de América. Su objetivo es cuestionar las exageraciones y críticas negativas de la Leyenda Negra, pero sin caer en el extremo opuesto de idealizar los hechos históricos (lo que se conoce como Leyenda Rosa). Su disponibilidad se estima para el último cuatrimestre del año 2025. Todo ello, llega gracias al acuerdo alcanzado entre Póntica y Megalevel, que se han unido para su distribución.
Con Plus Ultra: Legado, no solo jugarás, sino que aprenderás sobre la riqueza cultural de los pueblos indígenas de Mesoamérica y las complejidades de la llegada de los europeos al denominado Nuevo Mundo. El sistema de narrativa abierta es una de sus grandes innovaciones. En este formato, la historia y la jugabilidad están perfectamente integradas: los jugadores pueden moverse y explorar mientras interactúan con los diálogos y las narrativas, rompiendo literalmente los bocadillos de cómic para avanzar a su propio ritmo.
