Double Fine, empresa fundada por Tim Schafer, produce el remaster de una aventura gráfica que se publica originalmente en 1998, Grim Fandango. En aquella ocasión fue Lucas Arts la encargada de dar a luz un juego que debía seguir la estela de inolvidables títulos como Day of the tentacle o Monkey island.
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Grim fandango y la estela de Lucas Arts
Es inevitable asociar la figura de Tim Schafer a sus primeras colaboraciones en Monkey island o Day of the tentacle. Y siempre se va a comparar su trabajo, haga lo que haga, con estos dos tótems. Pero es un contraste un tanto injusto a mi parecer porque se olvida la evolución del género y Grim Fandango tiene además el hándicap de tratar de reinventarse y cumplir las expectativas, si no superar, marcadas por dos gigantes de las aventuras gráficas que están arriba de todo del podio colectivo.
En el original de 1998 hay muchos elementos reconocibles de aventuras anteriores de Lucas Arts: desde la estructura de cada capítulo bajo diferentes localizaciones, pasando por cómo acceder de una a otra para obtener los diferentes ítems a fuerza de agotar todos los diálogos y explorar cada rincón de cada escenario, y el sistema de inventario y combinación de objetos para resolver puzles. Todo ello recuerda al SCUMM de siempre con pinceladas novedosas, pero no es algo negativo ya que la mayoría de aventuras gráficas siguen este mismo patrón aunque intenten disimularlo.
Es el esquema de Lucas Arts y es parte del legado a la industria del que Schafer participó. Hay un pedacito de evolución en cada aventura que nos ha llegado desde entonces, también por supuesto en las producciones de otras compañías, pero la estructura inicial sigue intacta y totalmente reconocible, para bien y para mal. En mi opinión, este Grim Fandango está como mínimo a la misma altura que las mejores aventuras gráficas, con una base actualizada en pseudo 3D pero con un fondo que sigue rezumando a los clásicos.
Y no es menos cierto que hoy en día es complicado enfrentarse a esas mecánicas tan peculiares si no se posee un cierto bagaje en el género. Cuesta entender esa manera tan peculiar de engancharse en un puzle y no poder avanzar, cuando la mayoría de los juegos actuales presentan todo tipo de ayudas en la «conducción». Y quizá por ello el género ha evolucionado hacia otras fórmulas más simplistas, aunque los auténticos fans de la aventura renieguen de ellas.
¿Qué le hace tan especial?
Manny Calavera trabaja en la tierra de los muertos como agente comercial y recibe los encargos de acompañar a los recién llegados, un eufemismo para hablar de los que acaban de morir, hasta el descanso definitivo en el cielo o el infierno a través de paquetes comerciales. Se diría que todo ese mundo es una especie de purgatorio impregnado de grandes referencias a la cultura ancestral mexicana. Como inicio la cosa promete.
Manny descubre un entramado de corrupción y tráfico de influencias tras observar que los encargos que se le asignan son siempre los peores y que de esta manera nunca conseguirá salir del «purgatorio». Su misión a lo largo de 4 capítulos será conseguir deshacerse del entramado, aunque en su camino se va a cruzar una tal Mercedes Colomar.
Lo mejor de Grim Fandango es la historia, es absolutamente hilarante y llena de personajes de lo más variopintos, desde el propio protagonista que es una calavera andante, pasando por toda una fauna de secundarios que se va a encontrar en su devenir y hasta los demonios que habitan la tierra de los muertos en las que deberá adentrarse.
Los escenarios son bastante variados. Cada capítulo de Grim Fandango representa un año de su «vida» en un lugar diferente. Una ciudad, un puerto, el fondo del mar… Humor e imaginación por encima de todo. Destaco mis momentos favoritos aquellos hacia el final donde aparece Chepito y su linterna a la espalda; o Glottis, el demonio conductor de cualquier vehículo dando el resto. El juego está doblado al castellano pero los NPC mexicanos conservan su jerga, es justo reconocer el gran esfuerzo de localización.
¿Remaster bueno?
Grim Fandango es el primer título de la era Tim Schafer que se desenvuelve bajo un entorno 3D utilizando la misma fórmula que vivimos en otros juegos contemporáneos como el primer Resident Evil de superponer a fondos pre-dibujados en dos dimensiones algunos personajes y objetos en 3D. Para esta ocasión se han limitado a adaptar los gráficos a pantallas HD, hablamos de 2015, y allí donde había elementos poligonales 3D se han aplicado mejores filtros y algo más de resolución de renderizado.
El remaster permite jugar tal y como visualmente se veía el original, esto es aspect ratio 4:3 y marco para rellenar pantalla, y personajes renderizados por software en lugar de tirar de tarjetas gráficas más modernas. Es interesante pero no creo que nadie quiera jugar de esta manera.
Es una lástima que una vez más sea un remaster que se queda a medio camino en el apartado gráfico porque los fondos no han sido redibujados, simplemente se han estirado.
¿Vale la pena?
Desde el punto de vista del juego en sí es absolutamente imprescindible si nunca lo has jugado y eres seguidor de las aventuras tradicionales. Pero para disfrutar de sus puzles has de tener una cierta experiencia como jugador «SCUMM» y has de aceptar cómo estas mecánicas operan en el género, de lo contrario te puede frustrar.
Si por contra eres una persona que no ha jugado mucho a este tipo de juegos probablemente te va a costar bastante superar algún que otro acertijo, y el nivel de complejidad en Grim Fandango es elevado. No es tan enrevesado como los primeros Monkey Island o Broken Sword pero hay momentos en que hay que tirar de guía. O eso o encallarse y necesitar muchas más horas de las 10-12 inicialmente requeridas.
Aunque se puede manejar con ratón, en este y otros títulos se habilitaron las teclas para mover el personaje. Está claro que el ratón es perfecto en un mundo 2D pero para la ocasión se hace imprescindible tirar de estas para orientar a nuestro Manny o para resolver ciertos puzles donde la precisión que aportan es necesaria. Está en Game Pass y en varias consolas, pero si puedes es mucho mejor en un PC.
