Ni que las creencias ni tampoco las supersticiones paganas nos impidan buscar una esposa y desbloquear todos los secretos ocultos que se esconden en el mundo de Yaga. En el nuevo título de Versus Evil y Breadcrumbs Interactive, nos pondremos en el papel de Iván, un herrero manco maldecido con una increíble mala suerte, y al que bajo diferentes tareas e indicaciones construiremos una historia como si de un cuento se tratase. Su lanzamiento fue en noviembre del 2019 para diferentes plataformas, incluido PC, pero su versión era exclusiva en Epic Games Store. Sin embargo, el pasado 12 de enero ya podíamos disfrutar de este videojuego independiente en la plataforma de Steam con todas las mejoras realizadas durante los meses transcurridos.
Orientado a la historia de aquella anciana sobrenatural conocida como Baba Yaga, en este videojuego nos adentraremos en un mundo inmerso en el folclore eslavo y en las antiguas creencias paganas. Sin querer, Iván, un herrero manco y que vive tranquilamente en su aldea, ha sufrido una maldición y le convierte en una persona muy desafortunada, provocando que tenga que asumir tareas imposibles encomendadas por el azar. Mientras tanto, esta misteriosa bruja nos vigilará y orientará nuestro destino a su antojo. La peculiaridad de este videojuego es la manera de narrar la historia, ya que no es lineal y predeterminada, si no que nuestras acciones cambiarán la historia de este herrero, también su reputación y las mejoras que pueda elegir al finalizar una misión. Además, este juego nos facilita tres modos de dificultad: modo historia, modo normal y modo difícil. La diferencia de estos modos es mayormente la pérdida de objetos y la permamuerte.
Cuando nos aventuramos en sus mapeados, estos serán totalmente procedurales y tendremos que elegir previamente la misión que vayamos a acceder, dándole una explicación a Baba Yaga. Cuando se trata de misiones, nos encontraremos una gran cantidad de estas, ya sea cogida por nuestro personaje o por algún NPC que nos encontremos de casualidad. Cada diálogo que ofrece será una opción que tendrá que responder Iván. Esto podrá ser: honorable, egoísta, enojado o vago y cada opción puede alterar la forma en que se vaya a ir desarrollando toda la personalidad de este herrero. Por último, Iván puede elegir cuándo se aventura en el mundo, salir de día o de noche y ofrecer diferentes ventajas dependiendo de todas estas decisiones.
No obstante, no hay un mapa del mundo para poder realizar un seguimiento desde nuestro lugar, si no que tendremos que fiarnos y confiar de los pequeños mapas para orientarnos, lo que provocará que tengamos que caminar en ocasiones sin ningún sentido. De hecho, dentro de los mapas si nos encontraremos un elemento que nos podrá ayudar con lo anterior, unos hornos de piedra. Estos lugares, los cuales algunos tendremos que reparar, ayudarán y se usarán como punto de teletransporte hacia otro horno. Lo curioso es, que para saber hacia dónde tenemos que viajar, tenemos que quedarnos con el símbolo que está al lado de cada horno y así tener una orientación del mapa en el que nos encontremos.
Con respecto al combate, como cualquier otro ARPG, Yaga presenta algunos obstáculos ambientales y de combate con un ritmo rápido, aunque algo repetitivo. Aunque Iván sufra mucha mala suerte, el hecho de perder su brazo fue una bendición disfraza, ¿y por qué? Porque podrá colocarse herramientas en él, como un tenedor con una cadena, una hoz, una garra de un oso o una pala que nos servirán para muchos aspectos. Con un martillo equipado en su mano derecha y una herramienta unida en su muñón, Iván tendrá una mejor oportunidad contra algunos enemigos que sean muy tediosos. Lo curioso y uno de los puntos claves en la jugabilidad de este indie es la función del yunque. Como ya sabemos, Iván es herrero y eso significa que se podrá crear, mejorar y reparar su equipo. Cada herramienta podrá recibir propiedades con mayor daño, mayor posibilidad de caída de objetos, de oro, de aturdimiento…etc. Todo eso se realizará a través de una pequeña interfaz. Incluso, podremos lanzar nuestro martillo, algo que al final terminaremos por no usar, ya que se siente invaluable y en los encuentros no se le ve muy necesario.
No obstante, y cómo bien indicaba anteriormente, el ciclo de Yaga después de un tiempo se vuelve bastante repetitivo y, como consecuente, aburrido. Los enemigos no tendrán mucha personalidad y el combate, a pesar de ser completo con una barra de resistencia al estilo souls, es algo torpe y se echa de menos la visualización de números en daño porque no se logra ver ninguna mejora de nuestra arma y podemos pensar que siempre pegamos lo mismo. Por otro lado, y según la dificultad que elijamos, el acto de morir nos perjudicará de una manera u otra, pero por lo general podremos perder parte de nuestro equipo mejorado y el mapa se reiniciará, por lo que nunca será la misma experiencia, pero siempre la misma tarea: hablar con el rey, escuchar solicitudes totalmente locas, buscar el objeto que quiere, hacer alguna misión secundaria si llegamos a toparnos con ella y comenzaremos de nuevo.
En el apartado visual, Yaga ha querido prestar mucha atención a los detalles y centrarse en crear mundos llenos de vida, aunque seamos nosotros quienes activemos a los enemigos. Habrá mapeados de diferentes estilos con una estética única, y áreas totalmente cambiadas como son: nevadas, primaverales o, incluso, pantanosas. Estos mapeados se hacen aún más interesantes, gracias a las misiones secundarias que nos podemos encontrar de manera casual por cada uno de sus terrenos. Otro punto estético llamativo es la pantalla de carga, mientras vemos a las brujas mirar a través de un espejo roto a Iván. En el apartado sonoro, este videojuego indie ha traído una música urbana con toques Subcarpati e influencias trippy hip-hop y folk, una música que desconcierta en algunas ocasiones, y es que su implantación en cualquier momento terminará por no encajar del todo.
En conclusión, con Yaga podremos crear nuestro cuento favorito y leer, desde un punto de vista externo, cómo nuestro protagonista asume las consecuencias de nuestros actos. La manera en la que la narración tiene tanta importancia, consigue que el juego acuda a la innovación y, sobre todo, al sentir que cada historia se hace única. Sin embargo, tiene apartados que lo hacen repetitivo y tedioso, los combates, a pesar de ser completos, no logran crear entusiasmo o diversión, además de que la barra de resistencia no es desafiante. El yunque es un apartado muy divertido de investigar, además de que te anima a probar y experimentar con cada material que tenemos. Y aunque la banda sonora en ocasiones no encaje, te recomendamos Yaga por la sencilla razón de que Iván necesita tu ayuda para buscar una esposa y tener una mejor suerte gracias a ti.
Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por Plan Of Attack.