Tras triunfar su demo en el pasado Steam Next Fest, ya hemos jugado a la versión definitiva de este Scholar adventure: mystery of silence.
Primeras impresiones
Scholar adventure: mystery of silence es una aventura gráfica protagonizada por William, un joven escritor que en un ejercicio de búsqueda de inspiración se adentra en una abadía en la que sus habitantes han hecho voto de silencio. Lo que William va a encontrar entre las paredes de la abadía no es tanto una historia que merezca ser contada, sino un secreto que jamás debería salir al exterior.
Esta es la sinopsis que reza en su página web de Steam, desarrollado por Making Enemies (con Ayose Trujillo como único miembro) y distribuido por el estudio curtido en juegos indies DevilishGames, pero ya os advierto que Scholar Adventure: Mystery of Silence es un juego corto, de unas dos horas, y que forma parte de una suerte de episodios que seguirán a este título a partir de 2026.

Scholar Adventure: Mystery of Silence es una aventura point & click de estilo clásico, me ha recordado mucho al primer Monkey Island, el que apareció para compatibles hace eones y del que hablamos aquí. Ahora el relato nos transportará a una misteriosa abadía donde nada es lo que parece. Con una narrativa inquietante, poco esclarecedora y toques de humor negro, como el agujero sacro que sirve de letrina para los monjes o el diálogo socarrón en la cantina entre el tabernero y uno de sus clientes, todo indica que la serie se alargará bastante antes de cerrar la historia. Me atrevería a decir que las desventuras de William dependerán más del éxito comercial que de un guion cerrado de antemano.
El juego está desarrollado con PowerQuest, una herramienta indie que también se ha utilizado para crear otros títulos recientes tales como The Drifter e inspirado en las aventuras gráficas de los años 90. Visualmente Mystery of Silence utiliza la técnica de pixel art, aunque me entra la duda de si realmente todos los pixel art son iguales.
Abro una reflexión, una cosa es que técnicamente quieras asemejarte a los gráficos bitmap de los arcade de los ochenta y consolas de 16 bits, y otra que bajo un contexto de bajo presupuesto y medios se utilice esta carta para aliviar la carga en la producción de un juego. En el primer caso, aunque sea dentro de un ambiente retro, el resultado puede ser muy destacado, mientras que en el segundo el acabado es simplemente correcto, resultadista si me apuras, pero de menor calidad.

Y me temo que Scholar Adventure: Mystery of Silence tiene más de lo segundo. Y lo entiendo perfectamente teniendo en cuenta que es el proyecto de una sola persona, pero no quiero que nadie se lleve al engaño. El guion se ciñe a unas pocas zonas que podremos visitar y que se van desbloqueando conforme resolvemos puzles. Todo bastante lineal y casi sin posibilidad de error. Y totalmente limitado al recinto monacal.
Conclusiones
Con un solo botón de ratón puedes hacer todo. Desde coger cosas para el inventario hasta activar palancas, pasando por combinar objetos, todo muy SCUMM, aunque he echado en falta poder tener mayor variedad de situaciones, la concatenación de puzles era demasiado directa. Y me temo que toca rastrear bien la pantalla con el ratón, no hay tecla de activación de puntos calientes con los que interactuar.

Si jugaste a la demo, el extra de la versión completa no va mucho más allá, en torno a una hora adicional. En mi caso, me he quedado bloqueado al final del juego. De resolver acertijos simples ha pasado a uno imposible con el inventario que poseo, y eso que he probado literalmente todos los objetos en todas las salas abiertas -algunas se cierran tras la consecución del logro- y ese cambio tan brusco de dificultad no tiene sentido viendo cómo se estaba desarrollando todo.
Esperaremos a que se abra al público en general y se publique o una indicación o un parche. Podremos actualizar este artículo.
Este análisis se ha realizado en PC gracias a una clave proporcionada por DevilishGames




