Ayy la música en los videojuegos… todos tenemos en nuestra cabeza algún momento musical grabado a fuego. Ya sea por la epicidad el momento, como por tremendo temazo que se gastaron. Hay que admitir que la música puede convertir juegos mediocres en grandes obras. No, no voy a hablar de Deadly Premonition, (El juego es ortopédico al control, de gráficos anticuados y una optimización de pena, pero la música, la historia y los personajes salvan el resto) aunque sirve como ejemplo. El que nos atañe hoy es Metal Hellsinger.

¿Cómo definirías a un juego que hay que masacrar demonios al ritmo de música dinámica e intentar que no baje el multiplicador de la misma?. Pues lo definiría como «frenético y adictivo». Una premisa así es un poco complicada de realizar, pero he de admitir que aquí tenemos lo que yo podría considerar un hijo entre Crypt of the Necrodancer y Doom. Si, suena a palabras mayores, pero creedme, es completamente cierto.

Una Extraña, no tan extraña

Metal Hellsinger

La extraña, un demonio que a mi parecer tiene una similitud muy grande con Lilith de Diablo 4. Se embarca en un viaje de venganza contra La inquisidora, para así recuperar su voz robada. Una historia simple dónde las haya, pero voy a ser honesto, ¿importaba la historia en Doom? Pues eso. Aquí lo que vamos es a masacrar demonios a ritmo de metal y para ello…

Nada más empezar el juego hay que calibrar el ritmo para ver la latencia que tiene nuestro ratón. Una vez ajustado tendremos la introducción la cuál está narrada por Troy Baker (de verdad, ¿en américa no hay otros actores para dar vida a los personajes de videojuegos? entre él y Jennifer Hale como la voz de el Juez Rojo, siempre oímos a los mismos) y una vez nos hayan explicado las principales mecánicas, nos sueltan en el infierno para repartir leña a los demonios.

La música marca el camino

Metal Hellsinger

Si hay algo que caracteriza a Metal Hellsinger es la jugabilidad: frenética y al grano. Tenemos que masacrar demonios al ritmo de la música con diferentes armas, ya sean cuerpo a cuerpo o a distancia. Tendremos que ejecutar bien nuestras acciones, ya que si nos movemos al ritmo de la música siguiendo el metrónomo que nos indica el ritmo, haremos más daño. La verdad que merece el esfuerzo de intentar dominarlo, porque la coreografía que puede salir al ritmo que marca el juego es impresionante.

La música es dinámica, va sonando en base a un multiplicador de combo que vamos consiguiendo mientras eliminamos demonios. ¿Recordáis como funcionaba la música en Devil May Cry 5? Pues esto es igual, solo que aquí en lugar de toparnos con el estribillo, escucharemos la letra de la canción, ya que hasta llegar al multiplicador máximo, todo es instrumental.

Este infierno ya lo he visto…

Metal Hellsinger

La jugabilidad de Metal Hellsinger está bastante bien y cumple lo que promete. La música es otro punto a favor. Lo único que puede chirriar un poco es que cada uno de los infiernos que hay que completar pueden hacerse repetitivos. Estos consisten en avanzar, masacrar, sobrevivir a la oleada de turno y avanzar hasta cargarte al jefe. Son escenarios distintos, pero el ir haciendo lo mismo por cada uno de ellos, puede llegar a aburrir. Al menos hay unos excelentes temas musicales, los cuales no negaré que me hacen más amena la aventura.

Si simplemente hemos tenido un mal día y queremos masacrar demonios, el juego añadió recientemente mediante una actualización gratuita un modo horda. He de admitir que solo he dado dos o tres intentos, ya que he preferido ir desbloqueando armas y el contenido del códice avanzando en la historia, Pero el modo horda para unas partidillas rápidas va bien.

Entras estresado, masacras todo lo que puedas masacrar, cierras el juego, y ya estás relajado para toda la tarde. En serio, puede ser muy adictivo, así que hay que tener cuidado. Aparte, como recomendación, yo lo dejaría para cuando acabéis la historia principal. Antes será muy difícil, y no, no lo digo porque yo me estampase en él.

Metal Hellsinger: valoración final

Metal Hellsinger es un grandísimo juego si te gusta la premisa, claro. Yo, aunque no lo parezca, soy un gran fan de Crypt of the Necrodancer y tenía mis dudas si un juego de ritmo al más puro estilo Doom podría tener algo que aportar, y sinceramente me ha sorprendido para bien.

No reinventa nada, pero si tenemos en cuenta que el que escribe aplaude con cualquier momento musical bien implementado en los videojuegos…. No, no voy a hablaros de «ya sabéis quién» tranquilos. Considero que los videojuegos deberían innovar para descubrir nuevas formas de jugar. En su día los juegos de ritmo eran una novedad.

Recuerdo cuando era un crío como en clase se hablaba de PaRappa the Rapper  y Vib Ribbon como propuestas originales. Doom… que voy a decir de Doom, que no sepamos ya, un juego que puede correr en las cosas más raras que puedas imaginar, Así que poco más tengo que decir de él que no se sepa ya.

En resumen: Metal Hellsinger es una (corta) experiencia muy gratificante si te llama su mezcla. Te dará una, dos o tres tardes entretenidas. Recordarás su banda sonora aún cuando cierres el juego. Querrás que la calavera se calle por un mes. Pero lo mejor es que te divertirás. Y al fin y al cabo, lo que hay que valorar en un videojuego por encima de todo es que te divierta. Y eso Metal Hellsinger lo cumple de sobra.

Metal Hellsinger está disponible en PS4, PS5, Xbox Series, Xbox One y PC

Hemos realizado este análisis en PC con una código proporcionado por BestVisionPR

Análisis: Metal Hellsinger
La música sabe como marcar el ritmo del juego bastante bienGran variedad de armas para masacrar demoniosUn modo arena para dar rienda suelta a nuestro ritmo asesino
Puede acabar haciéndose repetitivo ya que los infierno se resumen a hacer siempre es lo mismoTroy Baker hasta en la sopaEscasa variedad de jefes finales
8.3Nota Final
Historia7
Sonido9
Jugabilidad9