Una isla paradisiaca y algo misteriosa puede ser el epicentro de una gran aventura, o de un siniestro secreto. Desde ErreKGamer traemos el análisis de Harvest Island. Se trata de un simulador de granjas pixelado con elementos de terror. Es el resultado del trabajo de Yobob, estudio integrado por un solo desarrollador.
El juego está disponible desde el pasado 10 de octubre en Steam y Epic Games. Sin más dilación vamos a comentar los principales aspectos de este curioso indie.
Contenido
La siniestra isla perdida
La historia de Harvest Island nos lleva a una isla perdida en mitad del océano. En dicha isla hay una granja habitada por un padre y sus dos hijos: Will y Samantha. El jugador asumirá el papel del joven Will que se dedica a cuidar de su hermana, explorar la isla y ayudar a su padre en las diversas tareas. Una de esas tareas es ofrecer diversos objetos a unas estatuas que representan a “los dioses”. Un panorama muy “mundano”
Sin embargo, el juego alterna entre estos tres personajes y otros habitantes de dicha isla. Uno de ellos “Becky”, una chica que parece preocupada y desconfiada. El jugador irá alternando entre Will y Samantha, descubriendo que la isla esconde muchos secretos. Algunos de ellos extraños y otros terribles que obligarán a luchar por sobrevivir.Bienvenidos a la Isla de la Cosecha.
El juego posee dos modos, uno centrado más en la historia y otro que tiene un equilibrio entre historia y mecánicas. Desde ErreKGamer hemos jugador vía este último modo para acceder a una experiencia lo más completa posible.
Harvest Island ofrece a los jugadores mecánicas en parte similares a otros simuladores de granjas como Stardew Valley. En la isla podremos explorar diversas zonas pixeladas. Bosques, alguna pradera, ríos, cuevas, playas, ciertos asentamientos y zonas subterráneas. Hay multitud de zonas en las que tarde o temprano tendremos que investigar. Algunas no son accesibles al principio salvo que cumplamos algunas de las múltiples misiones.
¿Qué más podemos hacer en Harvest Island además de explorar? Cultivar y recoger diversos productos, criar animales como vacas, ovejas, gallinas. También obtener productos de esos animales. Recoger algodón, insectos, madera, pescar. Podremos construir diversos edificios y objetos como cofres, muelles para pescar. Obtener minerales, tesoros bajo la arena de la playa. Cortar árboles para obtener troncos, tables y demás.
La vida en Harvest island
Muchos de esos objetos pueden ser ofrecidos en las distintas estatuas de los dioses presentes por toda la isla. Entre otras cosas nos proporcionarán “blessings” que es la moneda del juego. Esa misma moneda se usa para construir edificios, herramientas, mejorar u obtener cosas en las propias estatuas ya que algunas sirven como tienda para conseguir nuevos animales de cría, además de semillas y otras cosas.
También podemos guardar la partida, rezar para que cambie el tiempo y realizar extraños viajes rápidos entre otras cosas. Unos viajes que deberían estar mejor explicados. Cosa que se puede hacer también marchándose a la cama. Para realizar la mayoría de tareas incluso andar Will posee una barra de “stamina”.
Si se agota únicamente podremos andar. Al igual que en otros juegos de este estilo podremos recuperar energía con alimentos naturales o cocinados y durmiendo. El día se divide en distintos momentos que duran unos veinte o treinta minutos. Dependiendo del momento del día podremos encontrar objetos distintos, pescar peces distintos.
En Harvest Island hay diversos objetos y sucesos encontrados que nos llevarán a preguntar al padre de los hermanos sobre ellos. Sus respuestas, muchas veces evasivas nos mostrarán que no todo es lo que parece. Pronto veremos que ese “padre” esconde muchos secretos y mentiras. Lo que parecía una vida tranquila se puede terminar convirtiendo en una pesadilla poco a poco. Sobre todo, cuando asumimos el papel de Becky y nos encontramos con su “padre” y lo que ha hecho.
Por supuesto todo esto transcurre en el modo que hemos jugado de manera progresiva. Es decir, poco a poco, puesto que muchas veces incluso con alimentos cocinados la barra de stamina no nos permitirá más que hacer una serie de tareas determinadas al día, incluso aumentando la stamina máxima. Harvest Island es un juego en el que hay que ir poco a poco y tranquilos. O bien ir al modo historia para que el juego avance algo más rápido.
Un paisaje extraño junto a la canción de los dioses
Hemos hablado de los principales elementos de la jugabilidad de Harvest Island. Pasemos a los gráficos. Sabemos que el juego es un simulador indie. Sin embargo, los paisajes en general no están a la altura del resto del juego. Nos encontramos ante un pixelado en algunos puntos realista y atractivo. Por desgracia es demasiado tosco en general, no es un elemento que atrape al jugador.
Tampoco los modelos de los animales, los personajes o muchos objetos. Una lástima. Esto contrasta con la música, bastante bien trabajada. Una banda sonora que intercala momentos relajantes con otros más propios de situaciones de misterio y terror, como cuando asumimos el papel de Becky.
Conclusión
Harvest Island es un interesante indie en general. Es cierto que no deja de ser un juego muy influido por Stardew Valley (no es el único). Tienes interesantes mecánicas bien explicadas (en general) y horas de entretenimiento y diversión. Además, gracias a sus dos modos de juego tanto los jugadores más tranquilos como aquellos que prefieran enfocarse más en los misterios de la isla encontrarán en Harvest Island una buena opción para dedicar su tiempo.
Desgraciadamente el apartado gráfico no está a la altura del resto del juego, un estilo demasiado tosco sobre todo a la hora de comprar con otros juegos similares. Esto contrasta con el apartado sonoro que si está en consonancia con el resto del juego.
Mientras decides si adquirir Harvest Island…¿Echamos un ojo al artículo sobre los GOTY de 2023?
Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por VicariousPR
Viajero de los mundos, a través de la pantalla y las palabras. La estrategia como mayor interés dentro de esa maravillosa pasión que son los videojuegos.