Existe una tendencia en el género de la aventura, demasiado extendida en mi opinión, en referenciar (y reverenciar) en exceso las aventuras de Lucasfilm Games/LucasArts de la llamada edad de oro. Una mirada continua al pasado que suele pasar por intentar mimetizar lo que hizo grandes a esos juegos, muchas veces quedándose en lo superficial. The The Will of Arthur Flabbington, lo nuevo de Gugames, no necesita recordarnos continuamente cuales son sus referentes pero sí muestra un entendimiento profundo de sus mecanismos.
El estudio se compone únicamente de Fabio Guggeri, que se ha encargado en solitario de todos los aspectos del juego excepto el doblaje. Fabio lanzó en 2020 la original aventura comercial Kill Yourself y, desde entonces, se ha dedicado a participar en varias Jams con pequeñas joyas como Where Wolf?, No Rest for the Wicked o la versión corta y primigenia del juego que nos ocupa, The Will of Arthur Flabbington
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The Will of Arthur Flabbington, una evolución lógica
Si algo caracteriza a las aventuras que he podido jugar de Gugames son dos elementos; un diseño de puzzles ambicioso, exigente pero sin llegar a ser demasiado frustrante, y un sentido del humor muy característico. Se nota que se ha servido de toda esa experiencia a la hora de diseñar The Will of Arthur Flabbington, que se siente como una evolución natural de su estilo, con un salto de ambición importante respecto a esos trabajos anteriores.
En The Will of Arthur Flabbington nos pondremos en la piel de Jack Flabbinton, sobrino del fallecido Arthur, que descubre que no ha recibido nada en el testamento de su tío. Sí descubre que el susodicho tío ha prometido un tesoro a sus dos amigos de la infancia si cooperan entre ellos, los cuales se distanciaron por razones que descubriremos durante el transcurso de la aventura.
Nuestro objetivo no es que estos dos ancianos se reconcilien, sino conseguir nosotros ese misterioso tesoro. La primera idea de Jack pasa por contactar con una espiritista, a ver si consigue ponerse en contacto con el espíritu de su tío. El plan no sale como esperábamos y el fantasma que aparece corresponde a otro Arthur que no tiene nada que ver, que se verá obligado a acompañarnos hasta que consigamos nuestro objetivo.
Como ya he dicho, The Will of Arthur Flabbington parte de la aventura corta realizada para una Jam del mismo nombre. Para que nos hagamos una idea el primer capítulo (en el que tenemos que encontrar la manera de llamar el espíritu al plano físico) es el que corresponde, con algunos cambios, al juego original, el resto de la aventura es totalmente nuevo.
Arthur resulta uno de los grandes aciertos del juego. No solo crea una dinámica muy divertida (dos personajes que no se soportan pero están condenados a colaborar), también nos ayudará a avanzar: podremos alternar el control ente los dos personajes cuando queramos y, si bien el espíritu no puede interactuar con los objetos físicos, su incorporeidad nos será útil en más de una ocasión. También aprenderá alguna habilidad nueva como poseer a ciertos personajes que resultan esenciales para avanzar en la aventura y otorgan variedad en los puzzles.
Un diseño old school en el buen sentido
En cuanto a los puzzles, esta claro que son la gran apuesta de The Will of Arthur Flabbington. Nos encontramos ante un diseño ambicioso, que nos exigirá una atención a los detalles y un uso de la lógica lateral bastante afinado. Bebiendo, como decía al principio, de la filosofía de diseño de las aventuras clásicas de LucasArts (sobretodo los Monkey Island) tanto en su estructura como en lo poco obvio de sus soluciones, con una lógica de “dibujos animados” y humorística de sus soluciones.
También es cierto que no tiene una estructura tan abierta como puede parecer al principio. Tendremos varios objetivos simultáneos y una estructura de puzzles en paralelo que nos permitirán avanzar por otro camino si nos quedamos atascados en uno concreto pero solo hasta cierto punto. En realidad hay un orden correcto en muchos casos y varios de esos puzzles acaban dependiendo de lo que consigues en otro para desbloquear la solución apropiada. Aún así se agradece que no haya una excesiva linealidad.
Está claro que Gugames entiende bien los mecanismos del género y su intención es plantear un reto old school con la suficiente dificultad como para que nos tengamos que exprimir la materia gris pero sin resultar excesivamente frustrante, aunque en alguna ocasión no acaba de acertar. Mi principal crítica a The Will of Arthur Flabbington viene por la aparición súbita de algún personaje en escenarios sin ningún tipo de continuidad lógica.
Me explico; en un momento de The Will of Arthur Flabbington llegamos a un escenario con un personaje, solucionamos el puzzle que nos plantea y se va del escenario, quedando este vacío. Un par de horas después y tras haber avanzado en otros puzzles sin ninguna relación, aparece otro personaje en ese escenario que llevaba vacío un buen rato.
Desde mi punto de vista cualquier cambio de estado en un escenario ya explorado debería tener una justificación lógica, ya sea porque se ve afectado (directa o indirectamente) por nuestras acciones o porque se señala claramente el paso del tiempo diegético. También hay en The Will of Arthur Flabbington algún puzzle que es realmente difícil deducir con la información que nos facilita el juego, el típico que solucionas a través de probar todo con todo y un poco de suerte.
Estos problemas de diseño son una minoría y, si bien será habitual quedarse atascado de vez en cuando, encontrar la solución nos suele dar esa sensación de “Eureka” que tan satisfactoria resulta. Tengo un sistema bastante efectivo a la hora de identificar un buen diseño; pongamos que me bloqueo en un puzzle, si una vez solucionado mi reacción es “¿Como no se me ha ocurrido esto?” es que vamos bien, si es “esto no tiene sentido” es que hay problemas. En este caso la primera reacción gana por mucho a la segunda.
Pues este loop es lo que consigue The Will of Arthur Flabbington y muy pocas aventuras actuales se atreven a proponer, exigente pero satisfactorio. Una experiencia que renuncia a muchas de las ayudas actualmente de moda; fuera resaltador de puntos interactivos, fuera pistas, fuera diario de objetivos… Y me parece bien. Los objetivos son bien claros y siempre se pueden recordar hablando de nuevo con los personajes mientras que los escenarios son muy legibles y no hay pixel hunting.
No es puzzle todo lo que reluce
El sentido del humor es otro de los pilares del juego. Otra vez nos encontramos que Gugames ha entendido como se usaba en los clásicos de LucasArts y como se integraba tanto en el guión como en el propio diseño de juego, con muchas soluciones que en el mundo real serían más que discutibles pero tienen coherencia con el tono del juego. Alguna referencia para el nostálgico pero creando su propio estilo. No puedo negar que The Will of Arthur Flabbington me ha arrancado alguna carcajada.
Sobre los gráficos, son agradables y funcionales. Es un pixel art sencillote, se nota que Gugames no tiene una formación artística pero consigue plasmar todo lo que se propone de una forma clara e interesante para el jugador, con una buena composición de elementos y colores. Hay uno concreto, la calle que hay entre la plaza y el parque, que no deja claro que hay que dirigirse hacia los extremos para encontrar elementos de interés pero es la única excepción que he encontrado.
El diseño de personajes en The Will of Arthur Flabbington es muy simpático, también se agradece la cantidad y variedad de animaciones que nos presenta. El aspecto sonoro tampoco se queda atrás, toda la banda sonora es también obra de Fabio y nos ofrece varias composiciones tipo MIDI que encajan como un guante en el juego. Otro aspecto que destaca es el doblaje, bueno en general pero especialmente en el caso del fantasma Arthur (interpretado por David Howlett).
Es una lástima la ausencia de traducción al castellano, traducción que no tiene porque en su día no se llego a esa meta en el kickstarter. Aún así no pierdo la esperanza y ojalá el desarrollador se anime a incluirla más adelante.
En conclusión
The Will of Arthur Flabbington es el juego que estabas buscando si opinas que las aventuras de hoy en día son demasiado fáciles. Nos encontramos ante una aventura más que notable, divertida y que entiende bien lo que hace grande al género. Clásica pero sin estar constantemente mirando al pasado. Con un diseño un poco más pulido estaríamos hablando de excelencia pero, sin llegar a eso, se queda en una gran aventura.
The Will of Arthur Flabbington está disponible en Steam, GOG e Itch.
Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por Fabio Guggeri
