A través de un sorpresivo video en sus redes sociales, Eiji Aonuma ha confirmado en nombre de Nintendo que la secuela de The Legend of Zelda: Breath of the Wild se retrasa para la primavera del 2023, lo que termina de dar por cierto un rumor que se había instalado hace unos meses y que era el mayor temor de los nintenderos.
En el nuevo tráiler, el productor y máximo responsable de la saga Zelda, ha justificado la decisión de extender el desarrollo del juego en la enorme cantidad de nuevas mecánicas, funciones y encuentros que tendrá el juego, resaltando que esta aventura no será solamente por tierra, sino que regresaremos a los cielos de Hyrule.
A su vez, pudimos ver brevemente nuevas imágenes en las que, por fin, se devela el rostro de Link en esta entrega (dicho sea de paso, notándose un considerable upgrade respecto a su precuela), y en el que, además, pudimos visualizar a la Espada Maestra en un estado de deterioro total, por lo que intuimos que en la secuela de Breath of the Wild (cuyo nombre oficial aún no ha sido revelado) emprenderemos un viaje en post de restaurar la misma.