Overwatch 2 y Diablo 4 se han retrasado, anunció Blizzard Entertainment ayer, y es posible que esas esperadas secuelas no se publiquen hasta 2023, según los comentarios realizados durante una presentación de inversores de Activision Blizzard.
«Si bien todavía estamos planeando entregar una cantidad sustancial de contenido de Blizzard el próximo año, ahora estamos planeando un lanzamiento posterior para Overwatch 2 y Diablo 4 de lo previsto originalmente», dijo Activision Blizzard el martes. “Estos son dos de los títulos más esperados en la industria, y nuestros equipos han hecho grandes avances hacia su finalización en los últimos trimestres. Pero creemos que darles a los equipos algo de tiempo adicional para completar la producción y continuar aumentando sus recursos creativos para respaldar los títulos después del lanzamiento asegurará que estos lanzamientos deleiten e involucren a sus comunidades durante muchos años en el futuro».
Ni Diablo 4 ni Overwatch 2 tenían fecha oficial
Blizzard Entertainment no había comunicado oficialmente las fechas de lanzamiento de Overwatch 2 y Diablo 4, aparte de decir a principios de este año que ninguno de los títulos se lanzaría en 2021. Ambos juegos se anunciaron en la BlizzCon 2019, y se esperaba que Overwatch 2 llegara en algún momento de 2022.
Los fanáticos de Overwatch obtendrán una vista previa de las nuevas reglas de juego de Overwatch 2 la próxima primavera, cuando la Overwatch League se ejecute en una «versión inicial» del nuevo modo multijugador competitivo 5v5 de la secuela.
Los entusiastas de Diablo, por otro lado, obtuvieron recientemente una versión remasterizada del segundo juego de la serie en forma de Diablo 2: Resurrected. Blizzard Entertainment también está trabajando en un derivado móvil llamado Diablo Immortal , que recientemente entró en pruebas beta cerradas en Android en Canadá, Australia, Corea del Sur, Japón y China.
Periodista, escritora y curiosa. Detrás de cada afición y de cada hobby, siempre han estado presente los videojuegos en su vida. Comenzó conociendo los orígenes con una Atari 2600 y descubriendo la edad de oro del software español en un auténtico 8 bits con un Amstrad Cpc 464.