Muy larga ha sido la espera para volver a sentir las estupendas sensaciones que nos dejó en su día la saga S.T.A.L.K.E.R y es ahora, gracias a este Chernobylite de The Farm 51 que podemos por fin recuperarlas… y con creces.

Para muchos, sobre todo para los más veteranos, apelar a los S.T.A.L.K.E.R como carta de presentación seguro que es algo inmejorable y en efecto, la alargada sombra de los S.T.A.L.K.E.R se hace notar a lo largo de todo el juego. Sin embargo, el tiempo ha pasado y claramente el juego no renuncia a encontrar su propio camino, introduciendo todo tipo de novedades e interesantes conceptos pero sin perder por ello la esencia de lo que representa ser un auténtico stalker y permitir al jugador saber lo que se siente al adentrarse en la misteriosa y siempre peligrosa Zona de Exclusión de Chernobyl.

Una zona de exclusión que va a servir de pretexto para presentarnos un juego de supervivencia y terror, con algunos toques de rol, con una interesante trama de fondo y más de un misterioso secreto que desentrañar.

En efecto el rasgo predominante del juego, y lo que más lo define, va a ser siempre la supervivencia. Sobrevivir en la peligrosa Prípiat y alrededores se va convertir en nuestra principal tarea y en ese sentido el juego apuesta por nuevos conceptos jugables, que como ya he comentado, lo alejan notablemente de los S.T.A.L.K.E.R a pesar de compartir el mismo entorno y parecida ambientación.

En nuestro camino por sobrevivir y resolver el misterio que obsesiona al protagonista, el juego nos va a permitir construir nuestra propia base además de poder ir reclutando aliados que serán de inestimable ayuda a la hora de avanzar en nuestra misión, al mismo tiempo que serán los encargados de hacer las misiones secundarias para recolectar suministros y sobre todo de enseñarnos las nuevas y necesarias habilidades cuando vayamos adquiriendo la experiencia necesaria.

La construcción y gestión de la base van a ser también una parte fundamental del juego porque aparte de ser el punto de encuentro al final de cada misión con el resto de personajes que hemos ido reclutando, será del todo necesaria para construir, mejorar y modificar todo lo que vamos a ir necesitando a medida que nos vamos adentrando más y más en la zona de exclusión y en la trama del juego.

Una gestión de la base, que al contrario de lo que pueda parecer resulta bastante sencilla y entretenida, da su razón de ser a la continua necesidad de ir rapiñando todo lo que se pueda en la zona. Una continua búsqueda de suministros, armas y alimentos que serán indispensables para mantener y hacer crecer la base que a su vez nos dará acceso a construir lo necesario para poder sobrevivir y además poder acceder a los escenarios y situaciones más avanzados del juego.

En el juego hay misiones principales y secundarias, siendo las primeras las que hacen avanzar la trama y que siempre haremos nosotros mientras que dejaremos las secundarias en manos de nuestros aliados pudiendo elegir todas los días quien va a hacer que cosa. En estas misiones, casi siempre de búsqueda de suministros, nuestros aliados pueden resultar heridos, caer en un estado mental peligroso o incluso morir por lo que se hará necesario equiparlos bien y saber elegir a quien enviar en cada misión. No obstante, el juego también permite que nosotros hagamos misiones secundarias si así lo queremos, quedando las misiones principales a la espera de que decidamos hacerlas.

Además de avanzar en la trama será en las misiones principales donde nos iremos encontrando con los personajes que podemos reclutar a la vez que nuevas pistas para algunas investigaciones secundarias y opcionales que plantea el juego. En ese sentido cabe destacar la continua libertad de elección que le da el juego al jugador. Constantemente nos vamos a encontrar ante situaciones que nos pondrán ante la necesidad de elegir y apechugar con las consecuencias, lo que ciertamente además de ser un gran acierto hace que el juego sea totalmente rejugable. Cada misión principal va a acabar obligándonos a tomar una decisión, ya sea si matamos a alguien o no, si hacemos caso o no a nuestros aliados… decisiones que provocarán continuas bifurcaciones en la trama cerrando o abriendo nuevas vías de avance. Sin duda un gran acierto.


Como acertada es también la excelente, inquietante y terrorífica ambientación del juego. Salir de misión a la zona de exclusión siempre va a ser una tensa e inquietante experiencia con la sensación de peligro inminente siempre presente. Aparte de la amenaza representada por otros humanos en La Zona hay otros peligros y situaciones realmente aterradoras, emanaciones de chernobylita, una raro y radiactivo mineral surgido después del accidente de la central nuclear de Chernobyl y que además de tener un inestimable uso como fuente de energía atómica produce toda una serie de extraños efectos secundarios, desde alucinaciones y alteración de los sueños a sucesos «paranormales», agujeros de gusano para viajar por el espacio tiempo y por supuesto peligrosos y extraños seres procedentes de otra dimensión a la que se puede acceder gracias a la aparición de la verde e hipnótica chernobylita.

Un punto de partida y un entorno muy similares a la saga S.T.A.L.K.E.R pero con un sincero y exitoso intento de crear una mitología y una ambientación propias, que realmente funcionan y hacen de este Chernobylite un juego muy interesante.

Importante destacar otra interesante y llamativa peculiaridad del juego. Según lo planteado por los desarrolladores polacos de The Farm 51, la idea es que no tengas que cargar una partida cuando te matan, aunque poder se puede hacer, sino que al matarte la primera vez en una misión entra en juego un nuevo escenario donde te han capturado y estas en la base de los mercenarios que hay en La Zona y se te da la oportunidad de recuperar tu equipo e intentar escapar para poder regresar a tu base y volver a intentar la misión fallida al día siguiente con la consiguiente pérdida de un día en el juego… siendo más peculiar todavía lo que ocurre si te matan una segunda vez antes de abandonar la base de los mercenarios. En esta segunda ocasión se abre un agujero de gusano en el cual se le permite al jugador volver a la mañana anterior y repetir la misión como si no hubiera pasado nada y, aquí viene lo más llamativo, gastar trozos de chernobylita en cambiar las decisiones que hemos ido tomando en el juego para modificar así la trama a nuestra conveniencia.

chernobylite

Una extraña y algo extravagante forma que tiene el juego de afrontar la muerte del jugador, algo que ocurrirá con mucha frecuencia en los niveles de dificultad más altos, y nos da la posibilidad, gracias a la chernobylita, de alterar los acontecimientos pasados en una vuelta de tuerca al concepto de la manipulación del tiempo y el espacio… permitiendo así la rejugabilidad dentro de una misma partida mientras que se rompe de paso la cuarta pared con el jugador.

Sin duda algo sorprendente y posiblemente cuestionable pero también algo que contribuye a hacer de este Chernobylite un juego único y original en su especie.

El apartado artístico del juego no solo cumple sino que logra estar a una gran altura. Los gráficos y los efectos de iluminación, con el verde chernobylita siempre presente, están bien conseguidos y son muy realistas, salvo alguna bajada ocasional de frames la optimización es bastante buena incluso en los ordenadores menos potentes. Destacar también la excelente banda sonora y lo bien implementada que está en el juego, sin duda un aporte imprescindible a su estupenda y terrorífica ambientación.

En definitiva, el juego más que RECOMENDABLE para todo el personal, especialmente para los amantes de los juegos de supervivencia con buenos toques de terror. IMPRESCINDIBLE para los auténticos y veteranos stalkers con ganas de nuevos retos y que no necesitan excusa para volver a La Zona.

Hemos realizado este análisis en PC con un código proporcionado por All In! Games.

Análisis: Chernobylite
Aporta nuevos conceptosAmbientación únicaExcelente banda sonora
Alguna bajada de frame
8Nota Final
historia9
jugabilidad7
gráficos8