Nikoderiko: The Magical World, desarrollado por Vea Games y distribuido por Knights Peak, es un colorido y precioso juego de plataformas en 2.5D, con un apartado artístico precioso y una banda sonora sobresaliente, el cual bebe directamente de la saga Donkey Kong Country y, en menor medida, de Crash Bandicoot.
Contenido
Nikoderiko: A la caza del tesoro
En Nikoderiko: The Magical World encarnamos a Niko y a Luna, dos simpáticas mangostas aventureras quienes andan tras la pista de un maravilloso tesoro. Pero en el momento en el que lo descubren, son asaltados por el barón Grimbald y su ejército de Cobrings los cuales también andan tras la pista de dicho tesoro, lo que provoca que nuestros protagonistas pierdan la contienda y el tan ansiado premio. A partir de ese momento, Niko y Luna se embarcarán en una apasionante aventura para derrotar a Grimbald y a sus secuaces, y así hacerse con tan ansiado tesoro.
Nikoderiko: Un DKC con otras skins
Lo que nos vamos a encontrar en este precioso juego es un Donkey Kong Country de primer nivel pero con otras skins, así de claro y así de simple. En mi caso, dado que soy un auténtico apasionado de la saga DKC, y que el DKC2 es mi videojuego favorito de todos los tiempos, no creo que sea difícil adivinar que a mí, este juego me cautivó desde el minuto uno.
Nikoderiko: The Magical World es un maravilloso juego de plataformas de corte clásico, con todos los elementos que han hecho célebre la saga de nuestro simio favorito. Nos movemos en un entorno en 2.5D, con unos escenarios de lo más variopintos, y repletos de una gran variedad de enemigos.
El sistema de combate para acabar con los enemigos no podía ser más clásico. Podremos acabar con ellos saltando encima de sus cabezas, con una segada o bien lanzándoles algún objeto. La mayoría de enemigos morirán de un solo golpe, pero algunos de ellos sí que necesitarán más de un impacto para ser derrotados. Como detalle adicional, mencionar que podremos elegir jugar los escenarios como Niko o como Luna, según prefiramos, e incluso contamos con un modo cooperativo para vivir esta aventura en compañía de otra persona.
El juego está dividido en mundos que se irán desbloqueando a medida que vayamos completando los diferentes niveles, y en ese aspecto, no podría sentirse más clásico. Vuelvo a recalcar, no por ello tiene que sentirse necesariamente como algo malo, ya que en Nikoderiko han sabido implementar todas estas mecánicas clásicas con muchísimo gusto.
Dentro de cada nivel nos vamos a encontrar con una serie de coleccionables los cuales, una vez más, nos remitirán irremediablemente a la saga DKC.
Tenemos una suerte de «hadas» que podrían ser las bananas, unos diamantes enormes que nos pueden recordar a las tan difíciles y codiciadas «Monedas DK» que encontrábamos en cada nivel de la saga simiesca… Y siguiendo con esta línea, no podían faltar los barriles de bonus, los cuales nos recompensarán con una llave especial una vez hayamos completado el desafío que nos proponen.
Al final de cada nivel nos encontraremos con una especie de barril al que tendremos que golpear repetidas veces para finalizar dicho nivel, y entonces ya nos aparecerá la pantalla de recuento con todos los items que hayamos conseguido, y con aquellos que nos falten por conseguir. Esto hace que los niveles presenten una rejugabilidad bastante alta.
Otro punto chulo a destacar es que no siempre vamos a jugar desde una perspectiva de 2.5D. En ocasiones, los escenarios adoptan una perspectiva de 3D que se intercala con la antes mencionada, consiguiendo que la experiencia de juego sea aún más rica.
Y por supuesto, Niko y Luna no van a estar solos en esta aventura, ya que van a contar con la ayuda de diferentes animales/monturas (cada uno de ellos tiene un ataque/habilidad únicos) que podremos invocar en diferentes puntos y que nos ayudarán a pasarnos el nivel en cuestión de manera más sencilla, así como acceder a determinados secretos y bonus que, de otra manera, resultarían inaccesibles.
Cobrings: Los nuevos Kremlins
Los enemigos en Nikoderiko me han hecho especial gracia, ya que los Cobrings y su líder, el Barón Grimbald, son un trasunto de los míticos antagonistas de Donkey Kong, los Kremlins y su líder King K. Rool. No puedo quitarme la sensación de que son los primos hermanos de estos últimos, y los enemigos que a mí me hubiera gustado tener en DKC Returns y Tropical Freeze.
Nos vamos a encontrar con una gran variedad de estos enemigos, y cada uno de estos presentan un punto débil diferente: Algunos deben ser derrotados saltando encima de ellos con salto o segada, algunos sólo con segada o con salto, otros sólo pueden ser derrotados si se les lanza un objeto, etc.
Y por supuesto, la calidad y la variedad de los Bosses está a la altura de lo esperado.
Nos vamos a encontrar con unos Jefes finales de lo más variopintos: Desde un castor gigante, pasando por un dinosaurio/capataz con potentes brazos perforadores, una planta carnívora gigante… Cómo digo, la variedad está servida, y los combates presentan la dificultad suficiente para que no resulten desesperantes, pero que tampoco sean tan fáciles como para pasárnoslos a la primera. Todo un acierto.
La música en Nikoderiko: Una obra maestra
Si tengo que destacar un elemento por encima de los demás en Nikoderiko: The Magical World, ese es sin duda la banda sonora. Y esto es así porque está compuesta por, ni más ni menos, que mi adorado David Wise (principal responsable de toda la saga DKC, y creo que con eso os lo digo todo).
Wise es, simple y llanamente, mi compositor favorito de bandas sonoras para videojuegos, y en esta ocasión vuelve a estar a la altura de lo esperado. La música nos recordará inevitablemente a la de nuestra querida saga simiesca, y eso para mí es algo que me roba el corazón irremediablemente. Y para muestra, un botón:
Un apartado artístico precioso
Como habréis podido suponer por las imágenes que he ido subiendo y por lo que he ido diciendo, Nikoderiko posee un apartado visual precioso, colorido, evocador y muy cuidado.
Este es otro de los puntos en los que los chicos de Vea Games han dedicado más cariño, y se nota. Por momentos, conseguimos olvidarnos de que nos encontramos ante un título Indie, ya que se siente como un título Tripe A dentro de su género.
Es cierto que existen algunas deficiencias en algunos efectos de físicas (falta de humo en los barriles/cañones y detalles por el estilo) que nos hacen recordar que estamos ante un título independiente, pero no es nada que no puedan solucionar con algún futuro parche.
Volviendo al tema estético, este preciosismo visual queda reflejado en una gran variedad de escenarios y ecosistemas diferentes, donde nos encontraremos con playas, cuevas, ambientes acuáticos, aldeas boscosas… Todo un deleite para la vista.
Montones de coleccionables
Uno de los elementos que hacen de Nikoderiko: The Magical World un título muy rejugable, es la gran cantidad de coleccionables que tenemos para conseguir.
Estos los iremos consiguiendo yendo a nuestro taller, en el cual nos venderán una serie de cofres (más valiosos cuanto más desembolsemos) de los que pueden salir tanto «figuras» de los personajes y antagonistas del juego, temas musicales, bocetos artísticos… Vamos, que si sois completistas, este apartado os va a hacer meterle decenas de horas extra a este juego, os lo aseguro.
Conclusión
Nikoderiko: The Magical World es juego de plataformas de corte clásico, con un apartado visual y sonoro sobresalientes, con una jugabilidad sencilla pero adictiva y con cientos de secretos por descubrir.
Es verdad que resulta demasiado clónico respecto a los juegos de DKC, pero si sois unos fanáticos de la saga simiesca, como es mi caso, este título os maravillará como lo ha hecho conmigo.
¡¡Uno de los mejores plataformas del año, sin duda!!
Este análisis se ha realizado en Xbox Series S con una clave proporcionada por J.F. Games
Análisis: Nikoderiko - The Magical World
✅ Lo Bueno:
• Una jugabilidad clásica y bien cuidada • Un apartado visual colorido y precioso • Una banda sonora sobresaliente • Decenas de coleccionables y secretos por descubrir❌ Lo Malo:
• Demasiado clónico respecto a los DKC • Algunos fallos en los efectos de las físicasSistema operativo: Xbox Series S
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