Yes, your Grace Snowfall se presenta como la secuela de Yes, Your Grace. Si no has jugado a la primera parte, es más que recomendable hacerlo, pues es un juego muy narrativo con toques de rol y estrategia, a pesar de que vaya de tomar decisiones. No tiene nada que ver con Reigns en ese sentido.
A pesar de esto, se puede jugar a esta secuela y entenderla perfectamente aun sin haber jugado a la primera parte. Sin embargo, es recomendable que la juegues, por supuesto.
Contenido
Una buena segunda parte
En esta entrega retomaremos el devenir del Rey Erik, que intentará gobernar una Davern que se recupera de la guerra contra Atana (la que se dio en el primer juego) y se prepara para la llegada del frío invierno mientras un grupo de bandidos conocido como Los cisnes hace de las suyas en los caminos.
Como en el primer Yes, Your Grace, tendremos que resolver los problemas de los peticionarios para satisfacer al pueblo y poder conseguir privisiones y dinero con los que viajar y comprar ciertos objetos, además de pagar a los ayudantes. Ahondaremos en el tema más adelante.
El arte de Yes, Your Grace Snowfall
Yes, Your Grace Snowfall tiene un estilo artístico precioso que hace justicia a la primera parte con ese HD-2D tan peculiar. No es solo el uso del pixelart en entornos 3D, sino también la iluminación, la que da una profundidad que sienta genial a estos espacios.
Los personajes tienen muchas animaciones y diseños de lo más interesantes. Por supuesto, los mejores diseños son los de los personajes principales.
Sin embargo, hay un pequeño problema. Supongo que el problema no es tan artístico sino a la hora de programar el juego, y es que algunos diseños de aldeanos no coincide con la petición que luego estos pedirán al rey. A veces se confunde el género, otras se ve en las ropas a una persona de clase alta pidiendo cosas de granjero y viceversa… Esto ha llegado a sacarme un poco del juego.
Por otro lado, las interfaces del juego son exquisitas y cuadran a la perfección con la temática y el tono del juego.
Una banda sonora envolvente
La música es espectacular. Ya se puede ver en la pantalla de inicio con un tema con voces que es capaz de poner el vello de punta. Todos los escenarios y momentos, especialmente los narrativos, están acompañados por una banda sonora que, sin duda, es memorable. ¿Podríamos estar ante uno de los candidatos a esta categoría de los GOTY? Pues… creo que sí. Aunque luego vaya a ganar el Expedition 33.
El doblaje, sin embargo, aunque es característico con ese idioma inventado, a veces queda oscurecido por ese error de programación que da voces a gente que se supone que no debería tenerla. Quizá es una decisión del equipo, y eso me parecería genial. Pero entonces debería notarse narrativamente, y no se nota. Solo parece lo que estoy seguro que es: un error.
El gameplay de Yes, Your Grace Snowfall
Yes, Your Grace Snowfall nos permite gestionar un reino y nos deja ver lo complicado que es, lo fácil que es que algo se tuerza, que alguien no quede contento o que usemos unos recursos para alguien que no los necesitaba tanto como la persona que ahora nos está implorando por salvar a su hija de un oso.
Por explicarlo deprisa, tenemos en primer lugar la influencia, que es la experiencia que consigues al completar casi cualquier cosa. Por otro lado tenemos la prosperidad que al final de la semana podremos intercambiar por dinero (para comprar objetos o alguna secundaria), puntos de satisfacción (si llegas a 0 pierdes) o suministros (con los que puedes viajar por el mapa.
Cuando llega un peticionario nos expone su problema. Aquí tenemos que decidir si queremos o no ayudarle, ya sea porque no tenemos recursos, porque queremos ahorrarlos, no nos parece importante o es una persona que está intentando timarnos.
Tras aceptar su petición, veremos una barra con puntos. Debemos elegir a nuestros ayudantes en función de lo que se les de mejor (A Oleg, por ejemplo, se le dan bien el combate y los animales). También podremos usar objetos para facilitar la misión. Una vez llegado a los puntos de colores, misión completada.
Los menús de Yes, Your Grace Snowfall no solo son artísticamente geniales, sino que son claros y concisos, a pesar de todos los elementos que tiene. Precisamente, el hecho de que tenga tantos elementos, la forma de introducirlos todos poco a poco y la claridad al representarlos en los menús es lo que hace que este videojuego sea tan bueno.
Ni Almodóvar es tan trágico, de verdad lo digo
La narrativa de Yes, Your Grace Snowfall es muy buena. Es un juego con una traducción preciosa. Los textos de las expediciones son muy buenos, de verdad. Además, se nota que está traducido a mano y no por IA, pues hay alguna que otra erratilla de escribir que, viendo los esperpentos que solemos encontrar hoy en día, casi que da gusto verlas.
Los personajes están muy bien escritos. Erik y su ansiedad, Tymo y su padre, Asalia siendo una adolescente complicada o la reina Aurelea teniendo que ayudar a su marido mientras se preocupa por la salud de sus hijos. Incluso los personajes secundarios tienen cierta profundidad y podemos hacer ciertas secundarias para ver cómo avanzan sus vidas. Sin ir más lejos, uno de mis ayudantes me abandonó durante unas semanas para dedicarse la música.
Sin embargo, hay un punto que no sé hasta qué punto me gusta de Yes, Your Grace Snowfall… Y es que todo termina saliéndome mal. Ya no sé si es culpa mía o es que la historia va por ese camino. Si debe ir por ese camino, quizá deberían darnos más luces entre tanta sombra para hacernos sentir que estamos haciendo algo bien. Si es que yo lo estoy haciendo mal… la dificultad es endiabladamente difícil.
Sin embargo, y aunque tenga sus peros, Yes, Your Grace Snowfall ha demostrado ser un digno sucesor de la primera entrega. Es un juego que te envuelve en su mundo y su narrativa y, cuando te das cuenta, han pasado tres semanas y no has dejado de jugar.
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Este análisis se ha realizado con una clave para PC proporcionada por Brave At Night
