Habiendo pasado ya el primer fin de semana completo desde su salida el pasado viernes a las 00:00 hora española, Elden Ring se ha visto plagado de nuevo por jugadores con muchas ganas de disfrutar de este DLC que llevamos (nosotros incluidos) esperando más de dos años. Shadow of the Erdtree es claramente un punto álgido en lo que FromSoftware mejor sabe hacer: hacernos sufrir paisajes espectaculares, bosses increíblemente difíciles y mucho pero que mucho por aprender.
Hablemos sobre las reviews de Steam que actualmente se encuentran en «variadas» (mixed en ingles) con más de 32.000 siendo estas un 62% de positivo debido a dos problemas principales: su dificultad, en parte artificial y en parte por el diseño para crearnos pesadillas al dormir; el rendimiento que es todavía peor que el vivido en Elden Ring cuando salió, que ya era bastante pobre.
Lo cierto es que la comunidad de Elden Ring dicta mucho de ser la más sana, entre los defensores de su dificultad y que el juego debe pasarse sin invocaciones ni magias ni blablabla… y los que resumen todo en «git gud» (básicamente es «se mejor»). Pero una gran parte de esta comunidad está de acuerdo en la dificultad de este DLC: es demasiado alta y no para todos los públicos.
Sobre el rendimiento, yo mismo puedo decir que no entiendo lo pésimo que es en determinados sitios. Teniendo una 4080, un i9 13900K, el juego y el S.O en un M.2. es absurdo ver como el juego ni siquiera puede mantener los 60 fps estables en la mayoría de sitios y lugares, llegando incluso a crear microstuttering en determinados combates. Algo que te puede costar el mismo.
Lo absurdo del daño que tienen los bosses en el DLC de Elden Ring
El nuevo sistema de Elden Ring que incluye esta expansión para que todos los jugadores independientemente del NG+ en el que se encuentren y su nivel de almas es a su vez una de las mayores razones por las que todo el mundo está sufriendo. Llegas confiado pensando: tengo nivel 200 en la primera partida y todo me resultaba fácil, esto no puede ser tan difícil… y llegas a la primera antorcha andante. Te da un besito a distancia con sabor a piedra ardiente y a dormir.
¿Que ha pasado? ¿Como es posible? Pues bienvenido al DLC supongo... y si vamos a los primeros bosses, descubriremos que la cosa solo va a más. Cadenas de ataques sin un ápice de ventana para actuar más que un tímido golpe y «corre por tu vida o muere sin saber aún su patrón». A mi no me termina de disgustar, parte del encanto del juego es esa sensación de sufrimiento inalcanzable hasta que de pronto… alcanzas la victoria.
Pero entiendo que la gente se estrese y llegue a ese punto de: no es divertido jugar, lo dejo. No todo el mundo tiene porque pasar sus límites o dedicar muchas horas hasta entender como funciona un boss cuando al día siguiente debes ir a trabajar. Para los que nos quedamos con el DLC, ánimo en el intento de superarlo. Para los que lo dejan, que nadie os haga sentir mal: es difícil, mucho, y no está hecho para todo el mundo.